La maestría de Pepe Romero inaugura con brillantez el IV Festival de la Guitarra

Y para alimento, el que nos ofreció esa fuerza de la naturaleza que es Pepe Romero con una guitarra entre las manos. Anoche, Granada le volvió a agradecer el esfuerzo de pilotar con sus hábiles dedos el estreno mundial de la edición crítica de 'Homenaje a Debussy', la única pieza para guitarra que escribiera el más granadino de los compositores gaditanos, Manuel de Falla. Hablar de esta pequeña joya –70 compases bastaron para construirla– es hacerlo de una música llena de sensibilidad, innovadora tanto como respetuosa de la tradición musical europea, sus tiempos y sus sonidos.

El concierto se inició con la 'Canción del emperador' de Luis de Narváez, toda una declaración de sometimiento musical al artífice del escenario del recital; siguieron obras de Ángel Barrios –Arroyos de la Alhambra'–, la 'Serenata española' de Joaquín Malats, el mencionado estreno de Falla, la inevitable 'Recuerdos de la Alhambra' de Francisco Tárrega, pieza emblemática del repertorio de Romero que en sus manos cobra nueva vida cada vez, la 'Gran Jota' del mismo autor, y para finalizar esta primera parte, 'Zapateado' y Fantasía cubana', de Celedonio Romero, padre de Pepe y patriarca de la saga más importante de la historia de la guitarra. La técnica de Pepe Romero sigue siendo prodigiosa, y su sabiduría se traduce no en trucos, sino en mejoras. Cada concierto es un encuentro con la excelencia. Lo aprendió desde la cuna, y Romero no es hombre de desobedecer los consejos de sus mayores.

En el descanso, se entregaron los premios del Festival, a Pepe Romero por su contribución al conocimiento y aprecio del instrumento; a Manolo Sanlúcar –ausente por motivos de salud–, a quien va dedicado el ciclo, por su trayectoria, y a la Fundación Archivo Manuel de Falla, celosa y activa guardiana del legado del compositor.

Para la segunda parte, Romero contó con la colaboración de un cuarteto de cuerda de la OCG –Biely, Neriishi, Lyons y Dupont–, y de su esposa, Carissa, a las castañuelas, para interpretar un repertorio tan bello como exigente. El cuarteto comenzó con 'Adiós a la Alhambra', del clasicista Jesús de Monasterio; luego continuó la bellísima 'Música nocturna de las calles de Madrid' de Boccherini, y para finalizar, el 'Quinteto número 4, fandango', del mismo autor. Gran apertura para un Festival que nos llevará hasta dentro de dos semanas con una programación de lujo.

El director del Festival , Vicente Coves, anunció anoche que el Festival ofrecerá ocho conciertos en residencias de ancianos en cuanto la evolución de la pandemia lo permita, y que los recitales que se celebren a partir de hoy y hasta el próximo 7 de agosto serán gratuitos hasta completar aforo. El de Dulce Pontes –el 8 de agosto– necesita entrada para acceder a él, y estas se pueden adquirir en redentradas.com y en Oferplan de IDEAL. Además, la mayoría de los conciertos se ofrecerán por streaming en el canal de YouTube de la European Guitar Foundation.