El 'Amor Brujo' cumple 100 años en Granada
Jorge Fernández Bustos
Viernes, 25 de julio 2025, 23:28
Digámoslo sin reserva, alto y claro: tenemos una gran orquesta en la ciudad de Granada y, cuando está dirigida sabiamente, como este viernes en el ... Manuel de Falla por el maestro Álvaro Albiach, roza la excelencia. No tiene nada que envidiarle a ninguna sinfónica de Europa. Tenemos el deber de mantenerla y de alentarla en sus avatares. Al igual que contamos la gran cita veraniega del Festival de la Guitarra de Granada 'Antonio Marín', en su novena edición, dedicado al centenario de Manuel Cano; pero también al 70 aniversario de José Miguel Moreno; al 60 aniversario de Guitarras Alhambra; y a las memorias de la guitarrera Lisa Hurlong y del guitarrista Miguel Ochando fallecidos recientemente.
Lo dicho, anteayer, en el Auditorio de la Antequeruela, tuvimos el honor de celebrar los cien años del estreno del 'Amor Brujo' del compositor gaditano Manuel de Falla, en su versión de 1925. La cantaora trianera Esperanza Fernández fue la encargada de poner voz y semblante a la protagonista de esta obra, sumándose así a las grandes intérpretes que se han acercado a este 'Amor' en los últimos tiempos, como Rocío Jurado, Lole Montoya, Carmen Linares o nuestra Marina Heredia, en este mismo Auditorio o, hace unos cuantos años, en la plaza de toros, en su actuación memorable con la Fura dels Baus. Esperanza Fernández quizás ostente el mejor papel de Candela que recordamos, la más gitana en su elegancia. No solo es una gran voz, imprescindible para entender flamenco de este último medio siglo, sino que baila e interpreta; asume el papel y deja de ser esperanza para convertirse en la hechicera de Falla. Hay que agradecer, por otro lado, su ausencia de histrionismo y limitarse a ser un complemento, eso sí, necesario del conjunto. Esperanza es cantaora y no actriz. Su moderado empeño, la parquedad de su estilo, sin olvidar que estaba inmersa en su papel, es digno de encomio. La emoción del 'Romance del pescador' o de la 'Canción del fuego fatuo' fueron para enmarcar. Necesitan mención especial, aparte del director y la cantaora, algunos instrumentos solistas, como el violonchelo, la trompeta, el oboe, la flauta, el violín o la viola.
No obstante, el concierto tuvo una primera parte, con la exquisita 'Fantasía para un gentilhombre' de Joaquín Rodrigo, que en 2024 cumplió 70 años, interpretado a la guitarra por la concertista sevillana María Esther Guzmán, de técnica perfecta y delicada (a veces con menos volumen del deseado), que, tras varios minutos de aplausos, quiso regalar, en solitario, fuera del programa, 'Asturias' de Albéniz.
Una gran noche, como decimos, una buena actuación y una orquesta lograda; y la confirmación fidedigna, como lo supo ver en su día Manuel de Falla, de las buenas migas que hacen el flamenco y la música culta.
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