Javier Vielba: «Hacemos rock duro tocado con guitarras acústicas»

-Hace una semana vino en modo Meister, ahora con Arizona, hace nada con Corizonas. No hay mes que no nos veamos por este Sur…

- Justo lo comentaba hace poco con unos amigos de Granada… ¡qué alegría vernos tan a menudo! Para mí es muy buen síntoma que una ciudad tan importante a nivel musical nos reciba tan bien.

-Tiene usted más menús que un restaurante de la guía Miguelín.

-Soy un melómano muy inquieto, necesito expresarme de muchas formas. Si además esto sirve para ampliar el espectro de público, yo encantado.

-En Granada hay un grupo que se llaman Los 300, pero que son tres «que sonamos como 300», dicen… ¿lo suscriben?

-Vemos esos 300 y subimos hasta 3000.

-Ser tan pocos les permite trabajar sin guión claro. ¿Y que no haya dos noches seguidas iguales?

-Es lo bueno de un power trío, puede haber más sincronía entre todos y podemos fluir de forma casi telepática. Eso nos permite improvisar bastante en directo y sacar nuestra vena Grateful Dead. Nos encontramos como pez en el agua sobre el escenario.

-Leo que… ¿eso del 'Hard rock acústico' qué es?

-Aunque parezca mentira, es rock duro tocado con guitarras acústicas. Hoy en día hay muchos ejemplos de artistas que vienen del rock duro y el metal y se han centrado en la guitarra acústica o en la española. Nuestros favoritos en esa línea son los mexicanos Rodrigo y Gabriela, salieron a la vez que nosotros y nos sentimos muy identificados con su filosofía.

-¿Podría ser 'countryfolkblues 'eléctrico' alguna vez? ¿O van a seguir con instrumental de bajo consumo?

-Para electrificarse a tope ya tenemos a Corizonas, de hecho el 'The News Today' (primer disco) es muy country/folk/blues. Las guitarras acústicas son esenciales en Arizona Baby y aunque seguimos evolucionando constantemente la forma de tocar y sonorizar, no pensamos dejarlas en la funda.

-Cuando les oigo y veo a ratos me acuerdo de… ¿tuvieron contacto con un grupo madrileño de los setenta que se llamó Tílburi?

- Ni idea, no me suenan. Pero tomo nota.

-Gay Mercader decía que Dylan es adicto a las rayas… continuas de carretera. ¿Comparten esa adicción?

-Preferimos la raya discontinua para poder adelantar y así llegar antes al siguiente concierto.

-Aprovechando que el Genil pasa por Granada, ¿alguna vez los tres serán más?

-Fuimos cuatro en la gira de 'The Truth, the Whole Truth and Nothing but the Truth': Alex Izquierdo (Angel Stanich Band) se incorporó al bajo y coros esa época. También el ilustre granaíno Alfonso Alcalá, o el no menos ilustre madrileño Javi Vacas, han colaborado con nosotros al contrabajo alguna vez. Pero para ampliar formación, de nuevo, ya tenemos a Corizonas. Nos encanta el formato de trío… Casi todos nuestros grupos de rock favoritos son tríos. 

-Su fuerte siempre es el directo, ¿no estamos tardando para una grabación en vivo?

-Totalmente de acuerdo, ya va siendo hora de hacer un disco en directo. De hecho, ya estamos planeando un doble álbum en directo en plan 70s para el año que viene.

-Vienen a tocar a 2000 metros de altura, donde ya casi falta oxígeno en el cerebro. ¿Les va a quedar un concierto más psicodélico pues?

-Si aparece un dragón, habrá que intentar domarlo, como Santana en Woodstock. Si el tiempo lo permite, nos explayaremos en algunas canciones. ¡Hay muchas ganas de tocar allí!

-Con los sociables y amigos de sus amigos que son, seguro que conocen y tienen algunas palabras para sus socios de noche: T.Phantoms, Calavento y Fixed.

-La verdad es que no tenemos el gusto de conocerles en persona, ¡pero eso lo arreglaremos en Sierra Nevada!