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Sotelo, fotografiado en un hotel granadino. J. A. M.
«Enrique Morente me abrió su corazón y me hizo comprender el sentido del flamenco»
Mauricio Sotelo, compositor

«Enrique Morente me abrió su corazón y me hizo comprender el sentido del flamenco»

Durante el Festival ejerce como residente, y han sido varias las obras suyas que han formado parte de los programas. Hoy la OCG estrena una.

José Antonio Muñoz

Granada

Miércoles, 29 de junio 2022, 00:28

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El madrileño Mauricio Sotelo (1961), está en un momento dulce de su carrera. El hecho de ser el compositor residente del Festival está permitiendo, además, que quienes están acudiendo a los conciertos donde se programan sus obras descubran a un autor con una riqueza tímbrica y de conceptos difícilmente igualable en la música contemporánea –o moderna– española. Pero sobre todo, después de haber vivido un periodo turbulento, se le nota feliz. Y su alegría es contagiosa.

Cuando le comunicaron que sería el compositor residente del Festival de Granada, ¿qué le pasó por la cabeza?

–Para mí, es un sueño, porque mi relación, de tantos años, con el flamenco, mi amor y mi respeto por este arte, que en el pasado me ocasionó muchos problemas en el mundo musical porque hubo quien no lo entendió, se ve ahora compensado. Con todo, siento pena por quienes pensaron que «Sotelo se había vuelto loco, y ahora le gustan las rumbas y las sevillanas», por no conocer la riqueza absoluta y el legado inabarcable que supone la existencia de lo jondo.

El descubrimiento del flamenco no fue para usted, pues, un camino fácil.

–Desde que Enrique Morente me acogiera con tanta benevolencia cuando me acerqué por primera vez a él, hasta que la dirección del Festival hable de mí, muy exageradamente, como «el Falla del siglo XXI» ha habido un largo camino, sí. Y lo que me ha ocurrido es un honor.

¿Cuándo comenzó su relación con el Festival?

–Fue en tiempos de Enrique Gámez, en 2005, cuando hicimos los 'Sonetos del amor oscuro' con Poveda y Arcángel, en homenaje a Luigi Nono.

¿Con qué artistas flamencos ha trabajado desde entonces?

–Con muchos, desde el propio Enrique o Poveda hasta Carmen Linares o Marina Heredia, que ya cantó en una ópera mía en 1998, en Múnich.

¿Cuál fue su propuesta a Antonio Moral para articular su condición de compositor residente?

–Pensé que era adecuado usar un instrumento como la viola, que puede ser oscuro, que se presta a la evocación de ese timbre del cantaor o de la cantaora, para articular unas obras que llegaran al público. Y ahí también fue un gran acierto la elección de Tabea Zimmermann como artista residente. Pienso que nadie como ella para reflejar esa realidad sonora tan particular.

Durante estos días, ofrece el estreno absoluto de 'Cantes antiguos del flamenco para viola y orquesta'.

–Así es. Ante todo, debo decir que el público debe saber que aunque la obra se titule así, obviamente no he tomado cantes antiguos del flamenco para adaptarlos a una orquesta con solista. Hay referencia a cantes antiguos, como la Seguidilla del Marrurro, pero el territorio en el que trabajo habitualmente es un territorio imaginario, que quiere tener esa voz añeja, ese metal del flamenco auténtico. Así, comenzamos con un lamento, tenemos la seguidilla, la soleá, la bulería, en el centro hay una granaína... Empezamos con un dramatismo fuerte y luego entramos en una etapa de susurro. Pasamos por la trilla, el martinete... Creo que el público aficionado va a reconocer todos los cantes y esos ecos de cantes antiguos. El título de la obra es, claro, un homenaje a Enrique Morente, que tituló así a su legendario disco.

¿Cómo fue su relación con él?

–Me fui con 18 años a Viena, y un par de años después, fue Faustino Núñez quien nos puso en contacto. Le hablé del proyecto que tenía en mente, por entonces, una obra a partir de los 'Responsorios de tinieblas' de Tomás Luis de Victoria. Y dimos largos paseos por los bosques de Segovia hablando de todo... Me abrió su corazón, y con él descubrí el sentido del flamenco, tuve la oportunidad de escuchar el que se toca y se canta en familia, cuando se cierran las puertas.

Esta noche otro granadino, Juan Carlos Garvayo, va a interpretar sus obra 'Entra el alba en la Alhambra', además de la OCG.

–Juan Carlos también es un músico extraordinario, flamenquísimo. Pero como todos, ha ido descubriendo esa dimensión de su arte. Cuando le conocí tocaba música contemporánea, pero hoy es uno de los mejores intérpretes clásicos de lo jondo.

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