Amancio Prada triunfa con un concierto 'a su manera' en el Festival de la Guitarra
El espectáculo, titulado 'Libremente', fue una oportunidad para recorrer algunos de sus grandes éxitos y homenajear a las víctimas de la covid
José Antonio Muñoz
Granada
Viernes, 23 de julio 2021, 00:28
En España ha habido tres amancios importantes en nuestra historia reciente: uno era el mago del balón vestido de blanco, otro hacia batas de guatiné ... y miren ustedes lo redondo que le salió el negocio, y el tercero es Amancio Prada. Cantante, para quienes tengan la osadía de no conocerle. Berciano, ciudadano del escenario. De miles de escenarios. Ha cantado en conventos, catedrales, teatros –en todos los de Granada, como recordaba en la entrevista que mantuvimos con él–, e hizo su primera aparición en nuestra ciudad con el 'Cántico Espiritual' de San Juan de la Cruz, en el mismo escenario donde anoche obtuvo el aplauso de sus incondicionales –muchos peinan canas, igual que el cantante– y la ovación sorprendida de quienes aún no las peinan.
Vino Amancio a Granada después de varios años para, en el marco del V Festival Internacional de la Guitarra, para ofrecer un concierto sin cortapisas. Tras recibir una gran ovación por aparte del público al pisar el escenario por primera vez, y acompañado exclusivamente por las seis cuerdas, comenzó el concierto cantando la primera de las canciones de Federico García Lorca a la que puso música, cuando llegó como un 'maletilla' a París con una plaza, con infinitas plazas, en las que tejer sueños. Así, sonó contundente, dura y a la vez suave 'La guitarra', de 'Poema del cante jondo', luego 'A Mercedes en su vuelo', poema escrito a una adolescente, también de Federico, luego ', para a renglón seguida ir a Cuenca y retratarla en 'Ciudad encantada'. Retorno a Lorca con 'La canción de la mariposa', un tema, como recordó, hecho por encargo, y que, a pesar de su resistencia inicial, le salió redondo: «Volaré por el hilo de plata, yo soy el espíritu de la seda». Seda sigue siendo la voz del cantante, por la que parece que no pasan los años. Las notas altas siguen sonando limpias, y los fraseos son los propios de alguien que ha hecho del idioma español su material de trabajo. Por eso cada palabra sabe a gloria.
El otro ilustre 'granadino' que ha marcado su vida ha sido San Juan de la Cruz, presencia constante en su trayectoria. De él recordó su condición de prior del vecino monasterio de carmelitas donde hoy se asienta el Carmen de los Mártires y donde aún se yergue, disminuido, su árbol. Nunca cansa 'Llama de amor viva', ni recitada ni, mucho menos, cantada por Amancio Prada. Imposible condensar más amor en menos palabras.
El duende de Santa Teresa
Los místicos atraen mucho, porque su modo de expresar el amor por Dios nace de lo más hondo. De lo más hondo nació una bella versión de 'Soberano esposo mío', de la santa de Ávila. «Ahora es tiempo que veamos adónde llega el querer, si es verdad que nos amamos, yo ya me vengo a esconder entre este árbol y sus ramos». Nunca el deseo de morir fue tan dulce. Y de la estepa castellana, a la Galicia más verde, pasado de nuevo por el tamiz de García Lorca, y el recuerdo de sus 'Seis poemas gallego'. Si hay una 'cantiga de amigo' que forma parte del legado musical de Amancio Prada es 'Lelia doura', tocada con la guitarra casi como si fuera una zanfoña. La versión profana del poema de Santa Teresa, donde Prada demostró una vez más su buena forma vocal.
Lorca, presencia constante, volvió a sobrevolar el Falla con la 'Gacela de amor número 2', Y volvimos a inclinarnos con él ante la tumba de Rosalía de Castro, y oímos 'Salutación elegíaca a Rosalía de Castro', un homenaje de amor y de admiración, de lo que pudo haber sido y no fue, de esa amistad perdida entre las hojas de un calendario imposible. «Quiero que con estos claveles sangrientos llegue a tu sepulcro mi llanto y mi voz». El 'Noiturno do adolescente morto' abrió la puerta a Bécquer, y este, como si fuera una muñeca rusa, abrió otra, y luego otra más, hasta llevar al público a un éxtasis casi místico de aplausos incontrolables.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión