Sindicatos apuestan por que funcionarios de la Junta sigan teletrabajando mientras se mantenga la pandemia

Así lo han venido a trasladar representantes de los tres sindicatos en la reunión mantenida este lunes por la Mesa Sectorial de la Administración General de la Junta de Andalucía y la Comisión del VI Convenio colectivo del personal laboral de la Administración de la Junta respecto al desconfinamiento progresivo de la Administración andaluza.

En una nota, el presidente del Sector de la Administración General de la Junta (AGJA) en CSIF, Enrique Álvarez de Toledo, ha explicado que la central sindical aboga por mantener la situación actual del teletrabajo e incluso ampliar su uso, ya que «la mejor manera de terminar con la pandemia es reducir al máximo los desplazamientos por motivos laborales, y eso se consigue procurando que la mayoría de nuestro personal no salga de su casa, poniendo a su disposición las herramientas y equipos necesarios para ello«.

En todo caso, también ha exigido la desinfección de instalaciones, la realización de pruebas diagnósticas masivas de Covid-19 y la dotación de equipos de protección individual (EPI) adecuados al puesto que se ocupe, como «condiciones previas a la incorporación progresiva presencial del personal de la Junta que se produzca a partir de que se levante el estado de alarma».

Desde CSIF-A han planteado así a la Junta la necesidad, a su juicio, de elaborar un protocolo de desinfección de edificios y vehículos oficiales, y que todo el proceso de desinfección se realice con carácter previo a la reincorporación de los empleados públicos.

Asimismo, el sindicato plantea la realización de un estudio, por parte de las unidades de prevención de riesgos laborales, sobre los espacios donde debe trabajar el personal de la Junta, así como de un protocolo que permita establecer la distancia de seguridad de los dos metros entre trabajadores entre sí, y entre empleados públicos y la ciudadanía.

A juicio de CSIF, en dicho estudio deberían estar protocolizados aspectos como la flexibilización en las formas de acceso a los edificios públicos para evitar aglomeraciones, o la colocación de pantallas de protección para todos aquellos puestos cuyos empleados públicos tengan trato directo con la ciudadanía --como en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE), registros, centros de valoración o Agencia Tributaria, entre otros-- respetando, en todo caso, la distancia de dos metros entre puesto y puesto.

Igualmente, la central sindical reclama una previsión de stock y dotación suficiente de los equipos de protección individual (EPI) adecuados para los empleados públicos en función de las necesidades del puesto de trabajo que desarrolle. Para CSIF, ello debería ir acompañado de la elaboración por el Servicio de Prevención de cada centro de un protocolo de entrega de los EPI a los trabajadores para su reincorporación, así como de información sobre su uso y modo de empleo.

Otra de las condiciones previas que propone CSIF para la vuelta del personal es la realización de «test previos a la reincorporación a todos los empleados públicos que vayan a realizar su trabajo de forma presencial, para detectar posibles positivos que, en el caso de no ser identificados, podrían provocar un retroceso en el esfuerzo de todos por vencer esta pandemia».

Además, CSIF-A ha planteado la aprobación de un «complemento extraordinario de peligrosidad, penosidad y toxicidad» para el personal de la Junta que trabaja en los centros abiertos las 24 horas, para «compensar el trabajo que están realizando los empleados públicos durante estos días de crisis sanitaria debido al Covid-19».

CSIF ha querido destacar el buen trabajo de los empleados públicos de la Administración de la Junta durante el confinamiento, y ha valorado especialmente la labor que telemáticamente está desarrollando el personal del SAE para sacar adelante el volumen de trabajo relacionado con los expedientes temporales de regulación de empleo, entre otras cuestiones.

Por su parte, y en declaraciones a Europa Press, el coordinador de sector de administración autonómica de CCOO Andalucía, Pablo López del Amo, ha querido subrayar que la administración de la Junta «no se ha parado» en esta crisis, ya que hay «mucho personal que está trabajando», tanto de forma presencial, en la sanidad pública o en las residencias de mayores y los centros de menores, por ejemplo, como en la modalidad de teletrabajo, según ha recordado.

Desde CCOO-A no plantean objeciones a la idea de la Junta de priorizar, a la hora de la reincorporación progresiva presencial de sus empleados públicos, «aquellos ámbitos que tengan repercusión en la economía de Andalucía o que ayuden a que salgamos cuanto antes de ese bache económico», si bien inciden en que debe ser un plan organizado y que se materialice «de forma ordenada, en colaboración con las organizaciones sociales».

En esa línea, desde CCOO-A apuntan que «no podemos permitirnos un retroceso en el control de la pandemia» porque aumenten los contagios, y, por ello, reclaman que el personal que vaya reincorporándose a sus puestos cuente «con las suficientes garantías», habida cuenta de que el estado de alarma estará ya desactivado, pero «seguirá la emergencia sanitaria» vinculada al coronavirus.

De esta manera, desde CCOO-A apuestan por que la Administración autonómica ponga «sobre el papel» medidas «claras» sobre la protección que tendrán los trabajadores «antes de que empiece el retorno del personal» a sus puestos de forma presencial, si bien desde el sindicato también abogan por seguir fomentando el teletrabajo en aquellas actividades en las que sea viable, según ha expuesto López del Amo.

Por su parte, la secretaria del Sector de Administración Autonómica y Sector Público Andaluz de FeSP UGT Andalucía, Esperanza Morales, ha explicado a Europa Press que en la reunión se ha abordado la situación tanto del personal laboral como del funcionario de la Administración de la Junta a partir del documento que se les presentó el viernes en una reunión técnica con dichos tres sindicatos sobre el plan de reincorporación progresiva de los empleados públicos de forma presencial a sus puestos, aunque entrando «más en especificidades».

De entrada, desde UGT han propuesto que «todos los empleados públicos sigan teletrabajando hasta que no finalice la pandemia, como regla general», así como que dicha modalidad de trabajo se regule.