Critica en Google a un restaurante por no repartir en su calle y la respuesta del dueño es brutal

Esto es justo lo que pasa con La Buhardilla, un restaurante andaluz de Ronda (Málaga), que debido a varias malas experiencias decidió dejar de repartir en varios barrios de la ciudad. Pero no repartir su comida en esas zonas les está costando recibir muchas reseñas negativas y la última de ellas se ha vuelto viral en redes sociales debido a la respuesta que ha dado a la misma el propietario del restaurante.

«La comida es de las mejores pero dicha puntuación la pongo porque no reparten el a dirección que le puse por una mala experiencia», dice el cliente en la reseña en la que otorga dos estrella sobre cinco al restaurante y añade que la situación «no es problema mío ni mi culpa».

«Buenas Pablo, gracias por sus elogios a nuestra comida. Su barrio es de los más bonitos e históricos de Ronda, pero también conviven personas que tienen por hobby amenazar con cuchillos y robar a repartidores, casualmente a nuestros repartidores se les ha detectado intolerancia a las puñaladas con objetos punzantes», contestan desde el restaurante. Y la cosa no acaba ahí, ya que también dicen que «sabemos que no es su culpa ni su problema, pero sí el nuestro y por ese motivo seguiremos sin repartir en su zona».

Una respuesta que el influencer Soy Camarero compartió en redes y en poco tiempo ya sumaba más de 80.000 visualizaciones. «Cuando veo que las reseñas van con mala fe las contesto. Afortunadamente a nosotros nos conoce todo el mundo y una mala reseña no nos afecta, pero a otro negocio que viva del turismo sí que podría hacerle mucho daño», cuenta a IDEAL Alberto Caballero, propietario de La Buhardilla. Alberto lamenta que las personas que ponen estas opiniones no piensan en cómo pueden afectar a los negocios «ni a las personas que viven de él».

Sobre el hecho de que la respuesta se haya vuelto viral, reconoce que se lo toman como una anécdota y que no es algo a lo que le den demasiada importancia. «Hemos leído las respuestas y la verdad es que nos hemos echado unas risas. Tenemos otras reseñas iguales o incluso más cómicas».

En cuanto al motivo por el que no reparten en esos barrios, el propietario del negocio aclara que previamente han tenido «malas experiencias» en ellos que han derivado en denuncias y juicios, motivo por el que decidió «atajar el problema» dejando de repartir allí. «El ser humano siempre busca lo malo, lo bueno nunca lo suele ver. Puede haber 400 reseñas buenas que si hay una mala es en la que la gente se va a fijar», finaliza.