Moreno se marca el objetivo de acercarse a los 50 escaños para sumar más que toda la izquierda

No obstante, ha insistido en que trabajará hasta último momento para conseguir una mayoría suficiente que le permita gobernar en solitario. Para ello, según sus cálculos, necesita acercarse al medio centenar de diputados y sumar más que la izquierda. Enmarcó el anuncio realizado por Vox de que no facilitará su investidura si no participa del próximo gobierno en la lógica preelectoral y llamó la atención sobre que se trató de declaraciones formuladas «a cientos de kilómetros de Andalucía».

El presidente, que ha participado en el ciclo de encuentros informativos que organiza Europa Press, ha vuelto a marcar distancias con el partido de Abascal y advirtió de que «el que quiera entrar al gobierno de Andalucía tiene que entender que el interés de los andaluces está por encima de los intereses de los partidos». «El que no lo haga no tiene cabida en el Gobierno andaluz», dijo Moreno, que advirtió de que los discursos agresivos con quienes piensan diferente suponen un retroceso.

Por ese motivo, señaló que la estabilidad política es un valor en alza. «No quiero coaliciones de líos», enfatizó el candidato popular, que volvió a referirse a la posibilidad de una repetición electoral si del 19-J no sale la posibilidad de un gobierno viable. Se trata, dijo, de un escenario no deseable, ya que anularía la posibilidad de iniciar el próximo ejercicio con nuevos presupuestos, provocaría el enfado ciudadano y supondría incurrir en más gastos, pero aseguró que no formará gobierno si le imponen condiciones que no desea. «No puede haber una componenda para gobernar -subrayó-, todo el mundo conoce cuáles son mis límites».

Para construir esa mayoría que le permita gobernar sin condiciones, Moreno convocó a construir «un gran espacio de centro con la mayoría que no chilla, que no es radical», y apeló especialmente a los simpatizantes socialistas. Conseguir el respaldo de ese sector del electorado se ha convertido en un objetivo central de su campaña. «Juanma va a ser presidente solo o acompañado y algunos votantes progresistas prefieren que yo gobierne solo», aseguró.

Señaló en ese sentido la gran diferencia con las campañas electorales que afrontó desde la oposición, en las que recordó que había ciudadanos que temían al PP y desconfiaban de sus políticas en relación a los servicios públicos. «Eso se ha roto, el cambio es brutal, ya nadie se cree ese cuento», dijo.

El candidato a la reelección aseguró que es el único que se presenta con autonomía absoluta y contrapuso su situación con la del resto de aspirantes, especialmente con el socialista Juan Espadas, a quien considera subordinado a la estrategia de Pedro Sánchez. «Antes el PSOE de Andalucía le marcaba el paso a Ferraz, ahora es Ferraz el que le marca el paso a Andalucía», aseguró.