Moreno desvela su plan para «no perder el verano» en Andalucía: «Sería catastrófico»

El presidente de la Junta ha incidido en que la posible «pérdida» del verano desde el punto de vista turístico llegaría tras haber «perdido» la Semana Santa y fiestas primaverales como ferias, por lo que sería «una catástrofe en términos económicos y sociales».

Ha agregado que cree que «el Gobierno de España no ha entendido todavía» que la turística es «una de las mayores industrias que tenemos», hasta el punto de que este país era «la segunda potencia turística del mundo», según ha subrayado antes de apostillar que «eso significa que tenemos que mimar, proteger a todo el sector servicios, que genera muchos puestos de trabajo» en Andalucía y el conjunto de España.

El presidente andaluz ha aseverado que «tenemos que hacer todo lo humanamente posible por llegar a este verano con el mayor número de inmunidad posible, y llegar a acuerdos con Reino Unido, que ya tiene un importante sector de la población vacunada, para que haya corredores seguros«, aprovechando que es un país »emisor de turistas«, para que éstos lleguen también a España.

Moreno ha dicho que ve «falta de reacción» en el Gobierno en relación al sector turístico y en comparación con otros que el Ejecutivo «está tratando mejor» o hacia quienes ve «más preocupado».

«Al sector turístico le veo huérfano por parte del Gobierno en cuanto a atención, protección y seguridad«, ha comentado el presidente de la Junta, que, como »ejemplo« para justificar ese argumento, ha criticado que el Ejecutivo »va retrasando semana a semana« la »firma« del convenio con las comunidades autónomas para que lleguen a éstas las ayudas recogidas en el »plan de rescate« nacional frente a la pandemia.

Moreno ha subrayado que «ya estamos a mediados de abril», y se ha preguntado cuándo va a firmar el Gobierno esos convenios para que lleguen esas ayudas «para proteger a empresas pequeñas y medianas del sector turístico». «¿En junio, en julio, cuando ya estén asfixiadas?», ha cuestionado el presidente andaluz antes de zanjar advirtiendo de que «cuando alguien ya está ahogado ya no hace falta que le tiren un flotador».