Fernández-Pacheco lamenta que Gobierno sea «impulsor de la guerra nacional por el agua» en vez de buscar un pacto

«No nos cansaremos nunca de reivindicar algo que es esencial y es un Pacto Nacional por el Agua; un pacto en el que todas las administraciones públicas, independientemente de cuál sea el color político, seamos capaces de sentarnos en una mesa y llegar a un gran acuerdo para cumplir ese objetivo de llevar el agua a aquel que lo necesita», ha dicho Fernández-Pacheco en la clausura del Primer Foro Agricultura, Agua y Futuro en Málaga, organizado por el PP provincial.

Fernández-Pacheco se ha preguntado «cómo se explica que la Junta de Andalucía sea capaz, sin ningún tipo de conflicto, sin ningún tipo de problema, de conectar el Campo de Gibraltar (en Cádiz) con la Axarquía (en Málaga) para que tanto unos como otros se puedan auxiliar mutuamente en el caso que haga falta y, sin embargo, por ejemplo, en la comarca de Antequera sea imposible hablar del trasvase de Iznajar (Córdoba)?».

Para el consejero, la respuesta es que esto sucede «porque el embalse de Iznajar depende del Gobierno de España. Y punto», al tiempo que también ha cuestionado cómo se explica «el recorte histórico en la provincia de Almería que quiere perpetrar el Ministerio para la Transición Ecológica con el trasvase Tajo-Segura, condenando a todo el sureste español a contar con la mitad de agua de la que tiene ahora, en una decisión absolutamente arbitraria, política y en la que solo se ha escuchado una parte».

Según ha indicado, «los trasvases no son un regalo que un territorio le hace a otro, son la constatación de que todos los españoles somos iguales a la hora de disfrutar de un bien público como es el agua». «Y eso es algo que el Gobierno de España se tiene que meter en la cabeza y tiene que comprender de una vez si queremos ser capaces de vertebrar el territorio, dar oportunidad y garantizar el futuro a todos los españoles por igual, algo que hoy no tenemos desgraciadamente», ha dicho.

«Porque garantizar el agua es garantizar el desarrollo social y económico; es garantizar que la gente no tenga que abandonar sus pueblos, que no dependamos de terceros países o terceros territorios para ser capaces de alimentarnos; es garantizar nuestra soberanía, nuestra independencia también. Es garantizar el futuro», ha afirmado el consejero, quien ha insistido en que «eso desde la Junta de Andalucía lo tenemos muy claro y lo vamos a seguir defendiendo allí donde haga falta».

Ha señalado que la Junta seguirá «construyendo en positivo, acudiendo a las reuniones con la mejor de la predisposición, seguiremos siempre tendiendo la mano, con toda la generosidad del mundo, pero con la firmeza necesaria para exigir lo que entendemos que es nuestro».

Además, ha instado a «ser capaces de encontrar esos lugares comunes en los que podamos alcanzar grandes acuerdos, en los que la solidaridad y la generosidad entre territorios sea la que garantice el desarrollo igualitario de todos por igual».

Asimismo, ha dicho que «junto a ese Pacto Nacional por el Agua que la Junta de Andalucía implementa en el ámbito de nuestras competencias todos los días, sin importar el término municipal ni la provincia», seguirán apostando por «un enfoque integral en el que se tenga en cuenta que el agua es un bien transversal, un bien necesario y un bien escaso; en el que se tenga en cuenta la gestión eficiente».

En este punto, ha indicado que «cuando hablamos de agua tenemos que hablar de fiscalidad, del precio del agua, de la gestión eficiente; tenemos que hablar de la modernización de los regadíos, de las canalizaciones, del aprovechamiento de hasta la última gota; tenemos que hablar de innovación, de tecnología, de ciencia, de compromisos, de inversión, de presupuestos, de obras que se licitan y se ejecutan».

Fernández-Pacheco ha destacado que «ahora nos encontramos en una situación desde luego muchísimo mejor de la que teníamos hace algunos meses. Una situación que invita al optimismo, muy alejada de esa perspectiva tan problemática que teníamos hace unos meses, en la que todos vivíamos mirando al cielo y viendo qué medidas implementar».

Pero, ha apuntado que «si algo nos ha enseñado la sequía, que yo tampoco doy por finalizada, es que no podemos conformarnos con el agua que cae del cielo. Ni siquiera podemos conformarnos con el agua que somos capaces de almacenar»; por lo que ha apelado a «la conciencia ciudadana» y «al uso responsable del agua» y también ha apuntado que la apuesta por las aguas regeneradas y por las aguas desaladas «es sinónimo de garantía de futuro».