Condenado a prisión por causar la muerte de su mujer cuando conducía «con una borrachera intensa»

El accidente tuvo lugar el día 25 de diciembre de 2020 de madrugada. El acusado, sobre el que pesaban varias sentencias condenatorias por delitos vinculados con la seguridad vial previas, circulaba con su vehículo por la carretera que une Tomares con Castilleja «en condiciones no apropiadas para ello debido a la previa ingestión excesiva de bebida alcohólica, que le mermaban los reflejos necesarios para esta actividad», según se recoge en la sentencia dictada por un tribunal de la Sección Séptima.

Como consecuencia de ello, de la bebida ingerida durante aquella Nochebuena, «circulaba de forma despreocupada y sin prestar atención a las circunstancias del tráfico por lo que, con absoluto desprecio a las normas más elementales de seguridad, incrementó la velocidad hasta el punto de perder el control del coche de manera que, desviándose por la derecha, impacta con tal fuerza contra el quitamiedos lateral, que se introduce por el faro derecho del vehículo y sale por el maletero».

El hierro causó la muerte casi instantánea de la víctima, su mujer, que estaba sentada en el puesto de acompañante (copiloto). Después impactó contra la pierna izquierda de una sobrina, que viajaba sentada detrás. El vehículo circuló con el quitamiedos incrustado casi veinte metros más.

Al llegar los agentes al lugar de los hechos apreciaron en el acusado síntomas propios de embriaguez: olor a alcohol, ojos brillantes, pupilas dilatadas, amenazador, exaltado, eufórico, repetitivo de frases e ideas, gritos, incapacidad para mantenerse erguido.

Tras realizar la prueba de alcoholemia 36 minutos después del accidente el resultado definitivo, una vez practicada la deducción de errores del aparato, es de 0,86 y 0,79, conforme a lo dispuesto en la normativa. El estudio retrospectivo de la prueba de alcoholemia en el momento del accidente concluye que la tasa de alcohol estaría comprendida entre 1.78 y 2.09 gramos de alcohol por litro de sangre, o su equivalente en aire de 0,89 y 1.0 milígramos, lo que se corresponde con una «borrachera intensa», que implica una conducción altamente peligrosa. La velocidad en el momento del impacto oscilaba entre 76 y 82 kilómetros por hora, en un tramo con limitación a 50 kilómetros por hora.

En el momento del siniestro, en el coche viajaban seis personas: el conductor, que estuvo en prisión preventiva cinco meses; la víctima; dos sobrinos; la hermana del ahora condenado, y la hija del matrimonio con apenas dos años y en una silla de retención infantil. Además de la mujer fallecida, el resto de ocupantes sufrió lesiones y fracturas de distinta consideración.

Con el acuerdo de conformidad alcanzado por las partes, se ha confirmado la condena de tres años y un día por un delito de homicidio por imprudencia grave, seis años de privación del derecho a conducir; y junto a la compañía aseguradora deberá indemnizar a los padres de la víctima, su hermana, su hija y los otros ocupantes heridos en más de 420.000 euros en total.