Seguir o no seguir en Primera división
El Granada necesita sumar de tres contra el Almería, hundido como colista pero ante su última bala para salir de ahí, con las dudas de Lucas Boyé y Carlos Neva
Seguir o no seguir en Primera división es lo que se juegan esta tarde Granada y Almería en Los Cármenes. Mientras el resto de aficionados ... al fútbol asumen que ambos clubes serán de Segunda la temporada que viene, sus hinchas se aferran a las opciones matemáticas de ambos por conseguir la permanencia y saben que lo que hay en juego en el Zaidín por esta ocasión son mucho más que tres puntos. El ser o no ser de sus equipos, que luchan desde hace meses a la desesperada por una licencia para soñar con salvarse. Aun sin ganar, algo que el Almería no ha conseguido aún de hecho en todo lo que va de curso, ambos contrincantes se valen de sus meritorias actuaciones en la pasada jornada para creer en sus respectivas hazañas, que en el caso de los vecinos implicaría un milagro al estar hundidos como colistas.
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El Granada alimenta su fe
Si el Granada estuvo a punto de llevarse los tres puntos de Montjuic contra el Barcelona cuando más mermado parecía, con una defensa de circunstancias prácticamente, el Almería rozó la proeza de tumbar al Athletic con un futbolista menos durante toda la segunda parte al día siguiente en el Power Horse Stadium. Ambos compiten instalados en la urgencia, pero el equipo de Alexander Medina sabe que todo lo que no sea sumar de tres contra los indálicos podría terminar resignándoles a la honra por no acabar últimos. El 'Cacique', sin embargo, no quiere ni oír hablar de ello e incita a sus futbolistas a ganar y ganar, como hacía Luis Aragonés, tanto en esta jornada como en la siguiente también al calor de Los Cármenes contra el Valencia con el objetivo de los seis puntos posibles.
El Almería, no obstante, no está dispuesto a vender barata su piel y ya protagonizó un susto en el Zaidín hace nueve años, cuando obligó al Granada a salvarse en la última jornada muy lejos de su hogar, en Valladolid, aunque nunca solo. También esta vez se verán arropados por su afición los rojiblancos, al colgarse el cartel de 'entradas agotadas' durante la tarde del viernes bajo previsión de ambientazo total ante medio millar de hinchas visitantes.
Alexander Medina esperó hasta última hora a Lucas Boyé y Carlos Neva, que ayer se probaron junto al resto de sus compañeros para dirimir si podrán o no participar en el derbi andaluz. El delantero argentino luce todavía un vendaje en torno al gemelo de su pierna derecha por el pinchazo que sufrió ahí hace dos semanas, mientras que el lateral izquierdo gaditano y capitán habitual de un tiempo a esta parte sobre el césped no ha terminado de dejar atrás aún las molestias por las que finalmente se quedó en el banquillo contra el Barça. Salvo que el 'Cacique' arriesgue, Myrto Uzuni y Faitout Maouassa seguirán en sus puestos.
Ajustes atrás y en el medio
Medina también tuvo que darle vueltas a la cabeza a la reestructuración de su equipo atrás y en el medio por la sanción de Ignasi Miquel, con Bruno Méndez aún convaleciente, y las vueltas de Gonzalo Villar y Kamil Piatkowski tras la suyas. Lo normal es que el polaco supla al catalán en el perfil zurdo de la zaga, aunque jugar a pie cambiado derivó en su expulsión contra Las Palmas, y que Miguel Rubio repita titularidad a su derecha. Por delante, y siendo intocables Martin Hongla y Sergio Ruiz, el 'Cacique' podría insistir con Óscar Melendo como mediapunta al igual que en el último partido en casa, con Gonzalo Villar como falso extremo izquierdo de nuevo pese a su manifiesta incomodidad ahí.
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