El Granada solo mantiene a cinco de sus fichajes invernales de momento

Kamil Józwiak, Theo Corbeanu, Martin Hongla y Marc Martínez son las únicas contrataciones reales que llevan el sello distintivo del italiano y que cuentan de cara a la próxima temporada. Todos llegaron por la vía del traspaso, inversiones en jugadores esperando un rendimiento más o menos inmediato en Primera, pero también pensando en su mantenimiento en caso de que se consumara la caída a LaLiga Hypermotion.

De todos ellos, el que más convenció entre los aficionados fue el polaco Józwiak. Llegado desde la MLS, el campeonato estadounidense, en concreto del Charlotte, por 200.000 euros, el extremo de 26 años tardó en coger ritmo competitivo. Poco a poco mostró detalles de calidad y un apreciable cambio de ritmo que le convirtió en un fijo en las alineaciones desde la banda izquierda, a pie cambiado. Cuando pasaba por su mejor momento de forma, a los pocos partidos de llegar José Ramón Sandoval al banquillo, sufrió una lesión muscular que ocasionó que se perdiera lo que quedaba de curso. En principio ya tiene que estar recuperado para afrontar la preparación con el nuevo técnico, Guillermo Abascal, que arranca el 8 de julio. Lo normal es que sea diferencial en Segunda división, pero está por ver su adaptación. Firmó hasta 2025.

De Theo Corbeanu se espera muchísimo. Costó 750.000 euros por el 75% de su pase, traspasado por el Wolverhampton, que lo tenía cedido en el Grasshoppers suizo antes de llegar al Granada. Con 22 años, fue una apuesta de futuro, atado hasta 2027, pero no terminó de encontrar su mejor rendimiento. Dejó muestras de no estar exento de talento, pero careció del punto de competitividad que exige la élite en España. Buscará un contexto adecuado y la confianza de Abascal para explotar sus virtudes. Apunta a ser una opción en la banda derecha, aunque es una zona en la que es probable que llegue algún fichaje.

Con Martin Hongla hay varios interrogantes. Viejo conocido de la casa, por la que pasó cuando era más joven, se convirtió en la apuesta más rotunda de Tognozzi. El Granada pagó 2,7 millones de euros al Hellas Verona por el internacional camerunés, de 26 años, capaz de funcionar tanto como pivote defensivo como de central. Sin embargo, su rendimiento fue de más a menos, sin afianzarse en los planteamientos finales de Alexander Medina ni en los posteriores con Sandoval. Arrancó sus vacaciones más tarde que el resto por estar con su selección. Se le abre en el Granada una oportunidad de redimirse y asumir responsabilidades para devolver al equipo con los mejores. Es nazarí hasta 2027.

Marc Martínez completó la portería del Granada en enero, una vez que André Ferreira salió al Valladolid y Raúl Fernández quedó 'condenado' cuando no quiso marcharse del club antes de acabar su contrato. Marc dejó el Cartagena, en el que era titular, con el sueño de jugar en Primera, aunque a priori iba a ser la sombra de Augusto Batalla. Tuvo participación en los últimos partidos de los rojiblancos, tras la consumación del descenso matemático. Fue un ciclo complicado porque el equipo sufrió derrotas agrias. Él alternó momentos buenos y malos. El Granada pagó 100.000 euros por él y le queda vinculación hasta 2025. Por ahora, es el único portero del plantel, aunque lo lógico es pensar que vendrá como poco un guardameta más.

El quinto de los invernales no fue un fichaje como tal, sino un regreso. Al uruguayo Arezo se le caían los goles del bolsillo en su país durante su préstamo en el Peñarol, pero en Granada tuvo la pólvora mojada y apenas contó, tras un primer momento de protagonismo sobre todo con su compatriota 'Cacique' Medina. Su nombre está en la lista de posibles salidas, pero formó parte de una operación muy costosa: 5,7 millones de euros por la mitad de su pase, atado hasta 2026.