Los embalses de Granada acumulan un 28% más de agua que hace doce meses

Este es el dibujo de situación que dejan los datos más recientes del portal Embalses.net, relativos al pasado lunes. Los once embalses granadinos se encuentran, de media, al 43,6% de su capacidad, y almacenan un total de 406 metros cúbicos de agua. La cifra supone un incremento de hasta 28 puntos porcentuales sobre los 316 que se registraban en el mismo momento del año pasado. La mejoría llega hasta nueve de los once pantanos, que guardan hoy más agua que entonces, mientras los dos restantes, los de Cubillas y San Clemente, se encuentran exactamente en la misma situación que hace doce meses. En términos absolutos el de Negratín el que muestra la subida más acusada, con 37 hectómetros cúbicos más que en 2023, algo que no es de extrañar puesto que es, de lejos, el que tiene más capacidad de la provincia. En términos porcentuales, sin embargo, el repunte más elevado es el registrado en el embalse de Colomera, que tiene hoy más del doble de agua que entonces, con nueve hectómetros cúbicos frente a cinco. También es significativo el dato del de Los Bermejales, que mejora en dos tercios de su capacidad tras sumar diez.

De esta forma, el embalse de Béznar se queda como el más lleno de la provincia, al encontrarse al 84,9% de su capacidad, seguido del de Quéntar, uno de los que abastece a la capital granadina, que está al 71,4%. Por el lado contrario es el de San Clemente, que se mantiene sin variaciones al 10,26%.

Pese a que los datos muestran una evidente mejoría con respecto a la segunda semana de agosto de 2023, lo cierto es que los datos siguen estando lejos de los de un período de normalidad más o menos estable. Los once pantanos de Granada se encuentran hoy un 26,4% más vacíos de lo que lo han estado en el promedio de los diez últimos años. Es una tendencia generalizada y a la que solo escapan dos de ellos: precisamente los de Béznar y Quéntar, los que están hoy en mejor situación, que logran sumar ocho y un hectómetros cúbicos respectivamente sobre esta cota.

Todos los demás se encuentran por debajo, en especial el más voluminoso, el de Negratín, al que le faltan hasta 84 hectómetros cúbicos de agua con respecto a esta media. En términos porcentuales, sin embargo, el diferencial más alto se experimenta en el embalse de Francisco Abellán, situado en terrenos del municipio de La Peza, y que hoy tiene menos de la mitad del agua de lo que sería normal para sus propios registros; en concreto, un 56,5% menos.

Lo cierto es que es habitual que durante el verano el consumo de agua se eleve de manera significativa con respecto al invierno, ya sea por el incremento de la actividad turística, la necesidad de ducharse más veces al día o el llenado de piscinas, entre otras razones. El Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática recoge estos datos de uso de agua en su Encuesta de Infraestructura y Equipamientos Locales, que en su última edición cifra esta brecha de consumo en los 39,1 puntos porcentuales.

Los repuntes en este sentido son más elevados sobre todo en los municipios más turísticos de la Alpujarra, como Busquístar, Bubión, Pampaneira o La Taha, así como en algunas localidades costeras, como Rubite, y otras, como Huétor Santillán, donde la causa más probable tenga que ver con la existencia de las piscinas. El incremento de consumo alcanza o supera el 50% en 71 municipios de la provincia, cuatro de cada diez, mientras solo dos, Marchal y Jayena, ofrecen una caída de este indicador.