La cúpula empresarial del país reivindica su función social con el respaldo del Rey

En un momento en el que no se sienten cuidados por el Gobierno –el presidente de Cepyme llegó a hablar de «persecución»– el congreso de directivos puso en valor a los empresarios y a sus valores. «Sin complejos, hay que cambiar la imagen no siempre positiva que la empresa tiene», defendía la empresaria granadina Ángeles Zurita, que abrió el congreso como presidenta del comité organizador. Pero la mayor inyección de moral se la brindó a los ejecutivos el Rey de España agradeciéndoles su «dedicación y esfuerzo».

Apenas tres semanas después de elogiar a Granada ante los líderes europeos, su Majestad el Rey Felipe VI volvió a la ciudad de la Alhambra para clausurar este importante foro lanzando un mensaje de respaldo y ánimo a la cúpula empresarial del país para afrontar estos tiempos de incertidumbre para la economía española y mundial. «En España contamos con unos directivos de excelencia. Confiamos en vosotros y os animamos a seguir trabajando por y para el bien de nuestra sociedad. Desde las instituciones os apoyamos, de ahí que como me habéis escuchado decir muchas veces, y no me cansaré de repetirlo, la colaboración público-privada sea esencial. Todos juntos con un objetivo común seremos capaces de superar las incertidumbres y dificultades presentes para lograr las metas que merecemos», dijo Felipe VI a los directivos en Granada. El Rey analizó el escenario económico internacional «caracterizado por un elevado grado de incertidumbre y cambio de paradigma económico» y recordó que los «terribles sucesos» que acontecen en Oriente Próximo, junto a la guerra de Ucrania, y las tensiones geopolíticas tienen consecuencias sobre la economía mundial y provocan que las previsiones macroeconómicas tengan que ser revisadas.

«Este agravamiento de la incertidumbre global hace que el papel de los empresarios y en particular de los directivos y directivas de las empresas sea si cabe mucho más importante», subrayó el monarca.

«De vosotros depende la buena, mejor dicho, la excelente y responsable gestión de los recursos humanos y materiales de una empresa. Y de esta buena gestión como directivos dependen económica y socialmente muchísimas familias», expresó el monarca. Así, alineándose con el lema del congreso, les animó a orientarse hacia un nuevo liderazgo empresarial.

«Realmente os tenéis que sentir apreciados y valorados por la sociedad, por la que tanto hacéis, por la que tanto os esforzáis», concluyo el Rey, que recibió una calurosa ovación de los empresarios que llenaban la sala Manuel de Falla y que le recibieron puestos en pie.

En sucesivas ponencias, un importante panel de expertos puso sobre la mesa asuntos vitales para el tejido empresarial y el futuro de España como la energía, el conocimiento, la tecnología y la gobernanza del agua, la formación del talento o las fronteras de la inteligencia artificial.