Linares despierta del sueño en Riazor

El Albacete esperaba rival en la gran final por el ascenso tras superar al CF Rayo Majadahonda por un ajustado 2-1. Se medirá al Deportivo.

Menos de un minuto tardaron los locales en presentar sus credenciales ofensivas. Miku, con Razak, superado, echó el balón fuera tras una gran acción local por banda izquierda.

El duelo, en su inicio, estaba ofreciendo un fútbol abierto, con dos equipos alegres y ofensivos, poco encorsetados tácticamente. El Linares Deportivo, de rojo, aceptaba el guante.

Los de Alberto González tuvieron una clara opción de golpear primero. Ion Etxaniz remató en semivolea un centro medido de Carracedo que salvó el meta Mackay. Una acción que mereció acabar en gol en el minuto 7.

Siguió sumando méritos el bloque azulillo. Ion robó el esférico y su disparo lejano se marchó fuera por poco. Y en la siguiente acción el centro desde la derecha se paseó sin encontrar rematador por el área local, en una acción que acabó con un lanzamiento de Carnicer que blocó Mackay.

Cumplido el primer cuarto de hora el choque seguía siendo de ida y vuelta, pero las ocasiones más claras las estaban disfrutando los linarenses. Ion Etxaniz volvió a exigir a un Mackay con más trabajo del esperado.

La posibilidad de un ascenso, y más si es a la categoría de plata del fútbol nacional, es una fábrica de emociones. Unos 600 seguidores azulillos recorrieron 900 kilómetros en autobús, de ida, con la fe y la pasión como acompañantes y un hambre atrasada que, sumada a los ingredientes de esta fase de ascenso 'cocinada' por el ente federativo añadió grandes dosis de épica. Es complicado entender que un ascenso se decida en el estadio, con el colmillo retorcido por una afición en mayoría al jugar en casa. Riazor, un feudo nada neutral.

En el ecuador del primer round el encuentro se tomó un respiro. Mucho mejor el Linares Deportivo, asfixiando la salida de balón de los coruñeses y creando incertidumbre con rápidas y eléctricas transiciones.

González ha dotado al Linares de una inteligencia ajedrecística en la que el esférico se mueve con astucia buscando los huecos más débiles. Conoce la ciencia de este deporte y es capaz de involucrar a la causa a todo el grupo.

Al descanso se llegó con mejores sensaciones para un Deportivo que no lograba traducir ese leve dominio en ocasiones claras de gol. Pero con el partido consumiendo sus últimos instantes, el colegiado señaló una mano de Fran Lara en el área que el onubense Quiles transformó. Lara tenía la mano ligeramente despegada. Además, los jugadores azulillos reclamaron, poco antes, una posible mano en el área del Depor.

Los jugadores de ambas escuadras se marcharon al túnel de vestuarios enfrascados en una tangana por la polémica con la que se había llegado al final del primer tiempo.

Tras la reanudación, el Deportivo se empeñó en administrar cloroformo al juego. Confiaba en la ventaja y en que apareciera la calidad de sus jugadores de arriba. Quiles se asoció con Miku y Fran Lara salvó a su equipo en el último instante.

El encuentro, mucho menos fluido que en el primer periodo. La pizarra de Alberto González estuvo muy cerca de dar sus frutos. Josema peinó el esférico y el remate de Ion lo sacó, en la misma línea de gol, Héctor.

Y como el que perdona lo acaba pagando, Mario Soriano, en el minuto 63, dribló a todos los jugadores rivales que le salieron al paso y batió a Razak con un disparo certero pegado a la base del poste. Un tanto de muy bella factura para ampliar la renta del Deportivo.

Álex Bergantiños firmó un misil imparable para el tres a cero. Minuto 68, un castigo tan excesivo como inmerecido. Ycon el Linares, roto, dejando muchos espacios, Mario Soriano conectó en una contra con superioridad con Quiles. 4-0.