Las cartas bailan lo que el piano les toca
Magnífico espectáculo de magia y música como colofón a la vigésima edición del Festival Hocus Pocus
Andrés Molinari
Granada
Viernes, 31 de diciembre 2021, 00:46
El concierto para baraja y piano es un espectáculo redondo, en el que las corcheas se amigan con los tréboles y los arpegios con los ... corazones. Los ágiles pentagramas y los juguetones naipes siguen dóciles la batuta de MagoMigue, el indiscutible gran director de esta orquesta.
Con su locuacidad imparable, su humor que entrevera lo ingenioso con lo preparado y su capacidad de seducción para con niños y mayores de entre el público, en este concierto Miguel logra uno de sus mejores momentos, siempre con la baraja como compañera y por tanto siempre necesitado de esa pantalla que nos enseña sus manos y nos aumenta de los que son capaces ellas solas.
Dos horas de buena magia, de diversión continuada dosificando con acierto la comicidad, tanto verbal como escénica, con un variado abanico de cartomagia de calidad más que notoria.
En este caso el mago se ha hecho acompañar de Paz Sabater, una joven pianista buena ante el teclado y simpatiquísima cara al público. Con su camiseta a rayas y sus calcetines turquesa le quita almidón a la pose ante la partitura y sorprende a cada paso por su capacidad de improvisar. Si Migue nunca falla, ella se esmera con Falla.
Y no solo el músico gaditano. En este concierto hay una mirada poética a Lorca y un recuerdo nostálgico a Méliès, donde Javi Parra está muy gracioso.
Ayuda del público
Si tres son los palos en escena, muchos más les ayudan de entre el público, tan obediente como complacido. De todos, me quedo con Mario y Laia, grandísimos actores de menos de diez años pero que nos hicieron reír con sus arrobas de salero.
MagoMigue seguirá impertérrito con sus geniales trucos, realizados con esa baraja a la que se le borran en escena las figuras de la faz y los dibujos de su envés. Lo que no logrará nunca es que se borren ni las sonrisas de las caras del público ni la sorpresa de los ojos de los niños.
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