El Consejo Audiovisual urge a controlar el acceso de menores a Internet

Emelina Fernández, presidenta del CAA, explica que «Internet es un medio de comunicación totalmente integrado y consolidado en la vida de los andaluces. Un dato, el 63% de la población mayor de 15 años se conecta a diario por motivos distintos al estudio o trabajo». A ello se une que los padres se confiesan incapaces de controlar de manera eficaz los contenidos a que acceden sus hijos. El Barómetro Audiovisual de Andalucía, que el CAA realiza anualmente, indicaba en su última edición que una tercera parte de la población no limita el consumo de sus hijos menores de televisión ni de Internet. Quienes sí lo hacen se quedan solo en acotar el tiempo en el que van a estar conectados o ante el televisor, pero sin entrar en el tipo de contenidos a que acceden. «Vivimos un momento crucial. Ante los profundos cambios en la oferta audiovisual y en la forma de consumir esos contenidos, nuestras sociedades afrontan el reto de dotarse de normas que cojan el paso de los nuevos tiempos», indica.

Reto de la sociedad

Por ello, el CAA ha acordado pedir en su memoria anual que se amplíen sus competencias como autoridad reguladora «para garantizar la protección efectiva de los derechos de los menores de edad ante los contenidos difundidos a través de internet». Se trata, dice, de un «reto que tenemos como sociedad», de un «desafío común» a toda Europa y por ello la petición se enmarca en las alegaciones que el organismo ha remitido a Bruselas, dentro del periodo de consulta para la reforma de la Directiva Europea de Servicios Audiovisuales que se tramita en la actualidad y que se aprobará en 2016. Después deberá ser transpuesta, o sea, adaptada a las legislaciones nacionales y regionales, por lo que la presidenta de este organismo ha pedido que la cuestión sea considerada en la futura ley andaluza del audiovisual, que está actualmente en elaboración». La red es ya un elemento clave en la socialización de los andaluces, en su desarrollo personal y en sus hábitos de consumo», declara, pese a lo cual no es considerada de manera suficiente en el proyecto legislativo.

El CAA argumenta que el elevado consumo de internet por parte de los menores de edad, así como el fácil y rápido acceso de éstos a cualquier contenido online, hacen necesario que el marco regulador europeo reconozca y dote a las autoridades audiovisuales de estas competencias.

Además, pide que la Directiva Europea establezca mecanismos que fomenten la «alfabetización mediática» como instrumento para proteger a los menores frente a los riesgos que presentan los nuevos medios digitales.

En cuanto a los contenidos difundidos a través de internet, el Consejo cree necesario que la Directiva Europea avance en implantar la responsabilidad editorial de las páginas web (bien sean plataformas, redes sociales o cualquier otro tipo) ante la difusión de contenidos contrarios a la normativa aunque no sean éstas las creadoras o autoras de los mismos.

Fernández reconoce que el control de estos contenidos no es fácil. Si en materia audiovisual el CAA realiza su trabajo por medio de alertas y de quejas recibidas, en cuanto a webs, muchas en plataformas lejanas, la cosa se complica: «En la medida en que haya normativa de obligado cumplimiento en Europa, va acotando el terreno». Como ejemplo explica que «hemos tenido denuncia de una TV homófoba. Vimos que la licencia no era de Andalucía, por lo que pasamos la denuncia a la CNMC. Al homogeneizarse la normativa, es posible que la denuncia pueda ser efectiva aunque el operador esté fuera de nuestro territorio de competencia».

Contenidos bajo demanda

Otra de las propuestas remitidas a la Comisión Europea por parte del Consejo consiste en igualar los niveles de exigencia que rigen en la actualidad para la televisión lineal a los contenidos y operadores de televisión bajo demanda, ya que se trata de un formato emergente, cada vez más implantado en los hábitos de consumo de la ciudadanía. El Consejo quiere también obligar a las radios y televisiones bajo competencia autonómica que emitan por internet a incorporarse a un registro.

Asimismo, el Consejo propone que se establezca a nivel europeo una cuota de contenidos que promuevan la igualdad de género y la prevención de la violencia de género, de emisión obligatoria, al igual que hay un porcentaje de producción audiovisual europea.