'Sueños de Quesada' descubre hechos inéditos en la vida y obra de Zabaleta

En este nuevo ejemplar de la revista de arte, el biógrafo de Zabaleta, licenciado en Filología Románica e investigador, Luis Jesús Garzón, saca a la luz una exposición inédita que el artista realizó en Londres en 1956. Se trata de una muestra colectiva con 79 obras de 31 pintores españoles a la que Zabaleta acudió con 'Nocturno de las mujeres' (1955), 'El campesino y la niña' (1953) y 'El matarife' (1951). Garzón aduce que «esta exposición colectiva fue probablemente la muestra más importante que Rafael Zabaleta realizó en vida fuera de España».

Con portada en la que aparece el óleo 'Muchacha con un gato', que Zabaleta pintó en 1958, la revista de 44 páginas y 35 fotografías, pinturas y dibujos, ofrece 12 estudios con textos de gran valor para conocer la trayectoria artística y personal de Zabaleta. Entre ellos, Adela Tarifa, directora del Instituto de Estudios Giennenses, profundiza a través de los encuentros y la densa correspondencia epistolar que mantuvieron el pintor quesadeño y el escritor, cronista y docente ubetense Juan Pasquau, reuniones y cartas que denotan el respeto mutuo y una sincera amistad: «Un día de febrero de 1957 toman café juntos en un bar cualquiera de Úbeda. El escritor dedica un artículo a ese encuentro. Dice que Rafael venía con cierta frecuencia por esta ciudad y que en febrero lo hizo para traer al oculista a una vieja criada que se estaba quedando ciega. En sus diálogos Zabaleta afirmaba que la inteligencia o se reduce a bondad o no es nada».

Miguel Ángel Rodríguez, presidente de Amigos de Zabaleta, asociación constituida en abril de 2017 e integrada por pintores, escritores, profesores, intelectuales y amantes de la obra plástica del artista nacido en Quesada, analiza el repertorio iconográfico felino del pintor en el que en once de sus óleos aparecen gatos: El de la portada, 'Muchacha con gato' es como una instantánea fotográfica, una excepcional y elegante obra de un marcado equilibrio y armonía en cuanto a composición, color y juego de luces y sombras».

Vicente Ortiz, licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid, escribe sobre el paisajismo dual de Zabaleta: «Hay dos estéticas en el paisaje quesadeño de Zabaleta. Una es la del goce y contemplación y otra dramática y social. No hay un solo Zabaleta ni un solo Zabaleta auténtico, la pureza no existe».

En otro orden, el periodista e historiador Mateo Madridejos penetra en el legado espiritual y los recuerdos del historiador nacido en Jódar y fallecido en Madrid, íntimamente relacionado con Quesada, Juan Arroquia Herrera; el historiador del arte y escritor Gabriel Ureña perfila la singularidad del pintor y del museo que alberga su obra; la arteterapeuta Irene Rodríguez establece la relación entre Zabaleta y la acuarelista británica Beppo; el pintor Miguel Viribay pincela el universo geométrico zabaletiano; el pintor y poeta Carlos D'Ors se detiene en las manos rutilantes de los campesinos, segadores, pastores o cazadores del artista del expresionismo y el catedrático de ciencia Política en la Universidad de Barcelona Cesáreo Rodríguez-Aguilera de Prat evoca los 17 años de vida de la Fundación Cesáreo Rodríguez-Aguilera y la donación de cerca de 200 cuadros, 4.000 libros y documentos realizado por su padre a la Universidad de Jaén.