Nueva York tras los ojos de los Artero

El próximo 26 de septiembre se cumplirán 25 años desde la muerte del querido y respetado José María Artero. Una efemérides que Chema Artero (wwww.chemaartero.com), fotoperiodista vinculado a IDEAL durante más de siete años, ha aprovechado para «rendir homenaje» a su abuelo. Así lo indica a este periódico tras reconocer que la pasión por su profesión se debe mayoritariamente por la «inspiración» que le inculcó su figura. Un bello recuerdo que ahora cobra vida propia.

El joven autor, caracterizado por su fotografía social a través de una marcada obra humanista y claramente inspirada por la inquietud aventurera de su predecesor, ha reunido un total de treinta y dos fotografías de la ciudad de Nueva York, una mitad suyas y la otra de su abuelo, que marcan un hilo conductor de dos generaciones muy distintas y marcadas por la época que les tocó vivir.

«Fue durante mi primer viaje a Nueva York en 2015 cuando me vino el recuerdo de las imágenes que había visto en casa de mi abuelos. Pensé que sería bueno recuperarlas y darlas a conocer a la sociedad almeriense, porque fueron precisamente estas instantáneas las que despertaron mi vocación fotográfica», reconoce Chema Artero.

Bajo el nombre de 'Objetivos Cruzados', el Patio de Luces de la Diputación Provincial de Almería acogerá esta tarde, a partir de las 20.30 horas, la inauguración de una exposición que trata de reflejar la sensibilidad visual de José María Artero durante un viaje familiar en 1973 a la inmortalizada ciudad de Nueva York y la de su nieto Chema Artero cuatro décadas más tarde por los mismos enclaves de la Gran Manzana.

«Dos recorridos con más de cuarenta años de diferencia a través de los cuales, cruzando sus objetivos en el tiempo y en el espacio, los dos fotógrafos nos mostrarán su especial sensibilidad en su primera visita a Nueva York y como la ciudad de los rascacielos, sus paisajes y habitantes han ejercido un innegable influjo sobre buena parte de los creadores contemporáneos», define Juan Manuel Martín Robles, comisario de una muestra que está producida por la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino y que permanecerá en la sede de la Diputación Provincial hasta el próximo 30 de septiembre.

En la exposición, que refleja rincones de Nueva York tan conocidos como Central Park o Time Square, se ven claramente diferenciados los objetivos inquietos de los dos Artero. Tal y como señala José María Artero en un pequeño folleto que editó en 1973 para acompañar una exposición que realizó ese mismo año sobre su viaje junto a su esposa y a sus cuatro hijos mayores a Nueva York, las fotografías que se ofrecen en esta nueva muestra son obras sin pretensiones que reflejan «un compendio de lo bueno y lo malo que puede producir el hombre», en referencia a su experiencia en la Gran Manzana, una ciudad que él veía acertadamente como epicentro del futuro de la sociedad occidental.

Dos visiones

En este sentido, Chema Artero destaca que la exposición refleja «la yuxtaposición de las dos visiones, los dos viajes, en los que cada uno le toma el pulso a una ciudad infinitamente narrada, a su manera, descubriendo lo que tiene de única para nosotros. Mi abuelo desde una perspectiva más arquitectónica y yo más momentánea y callejera», añade.

Con motivo de la muestra, en la que también se podrán ver algunas instantáneas de José María Artero con un todavía rudimentario objetivo 'ojo de pez', la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino ha editado, con la colaboración de la Diputación de Almería, un libro homónimo donde se refleja el por qué de las imágenes capturadas y mostradas por ambos autores . El espectador podrá acercarse así un poco más a la faceta más desconocida de José María Artero, aquella que tanto ha inspirado a su nieto.