Dos noches de mirada al pasado medieval en Baños de la Encina

Tanto el viernes como el sábado, un gran número de locales y visitantes de pueblos limítrofes se congregaron en el casco antiguo de la población, engalanado con pendones y banderolas, para vivir la realidad de un zoco medieval instalado frente a la iglesia renacentista de San Mateo y el vetusto edificio del Consistorio, marco apropiado para juegos de saltimbanquis, bufones, malabaristas y cuenta cuentos, al son de tamboriles, dulzainas y zanfonas que al mismo tiempo animaron las danzas castellanas y andalusíes en medio de tenderetes de artesanía tabernas varias con sabor de antaño.

'Cucharro'

Damas, señores feudales, caballeros calatravos, moros y expertos en cetrería recorrían la Plaza Mayor y la explanada junto al castillo califal de Burgalimar.

No faltaron los talleres de cerámica y conciertos de música celta, así como la degustación gratuita del imprescindible 'cucharro', que es como en Baños de la Encina se denomina al pan con aceite, tomate y bacalao, acompañado de aceitunas de la tierra.

Este año, la noche andalusí ha contado con la participación de la asociación cultural de Moros y Cristianos 'Al-Kasar', de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), que con más de setenta componentes llenaron de color y fantasía el casco histórico de la localidad jienense.

Esta celebración cumple ya sus once años de existencia y tiene como meta principal recuperar el pasado andalusí de la villa y rescatar leyendas y tradiciones perdidas en la noche de los tiempos, como la de la 'entrega de la rosa' a las damas cristianas, una vez que firman la paz moros y castellanos.

Según el alcalde de la villa, Antonio Las Heras, el pueblo de Baños de la Encina se vuelca con la organización y participa en todas las actividades, lo que hace que esta sea una cita obligada en la comarca para todos los amantes de la tradición y la historia.