Más de 300 moradores de El Walili piden ser realojados al Ayuntamiento de Níjar

El proceso de desalojo y demolición del asentamiento nijareño donde viven, según esta plataforma, unas 500 personas se ha acelerado con la comunicación a parte de sus moradores de que la fecha elegida es el próximo lunes. Así lo ha autorizado el Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 4 de Almería a petición del Ayuntamiento de Níjar.

En un comunicado emitido a los medios de comunicación, la plataforma ha apuntado que la alcaldesa de Níjar, la socialista Esperanza Pérez Felices «se comprometió al realojo de todos los moradores de El Walili y a día de hoy no se sabe cómo lo hará».

Igualmente han recordado que en la reunión mantenida con dicha plataforma el pasado 12 de enero la alcaldesa garantizó el realojo de todos los moradores de El Walili antes de hacer el desalojo. «Todas las personas podrán residir en alojamientos temporales mientras que los Servicios Sociales Municipales no finalicen la gestión de un alojamiento digno y permanente para cada una», aseguró la regidora.

En el comunicado también relatan que, en la misma reunión, Esperanza Pérez informó que todas las personas que viven en El Walili se podrían inscribir hasta el 30 de enero en un registro que está desarrollando la Oficina de Servicios Sociales Comunitarios en San Isidro de Níjar, razón por la cual, la Plataforma Derecho a Techo ha recogido estos datos en el asentamiento «para asegurar que el Ayuntamiento tenga la información de todos los moradores y no quede ninguna persona sin realojar si así lo precisa».

«A cuatro días del desalojo nadie ha informado a los moradores de El Walili cómo será su realojo mientras el Ayuntamiento les ha cortado el acceso al agua y a la electricidad», han afeado.

Ante la incertidumbre creada en las personas que viven en Walili, la Plataforma Derecho a Techo ha pedido este jueves una reunión urgente con la alcaldesa «para que explique cómo se va a realizar el realojo de estas personas».

A su vez, en escrito dirigido a la Alcaldía de Nijar, a la Subdelegación de Gobierno en Almería, al Defensor del Pueblo Andaluz, otras instituciones y COEXPHAL, decenas de organizaciones de toda índole han mostrado su preocupación «por la situación promovida por el Ayuntamiento de Níjar» y han exigido la paralización del derribo de El Walili «y de cualquier otro asentamiento chabolista de trabajadores agrícolas migrantes mientras no se les ofrezca una alternativa habitacional permanente a sus habitantes y un plan integral de vivienda en el municipio que garantice viviendas dignas y asequibles para toda la ciudadanía de Níjar, tanto autóctona como extranjera».

Entre las organizaciones internacionales se encuentran Plateforme pour une agriculture socialement durable (Suiza), Coordinadora Europea Vía Campesina, Uniterre (Organización campesina de Suiza), Boerenforum (Vía Campesina en Flandes, Bélgica), La organización Landworkers' Alliance (Inglaterra), SOLIFONDS (organización de solidaridad suiza) o la Federación Nacional del Sector Agrícola de la Union Marrocaine du Travail.

«La repercusión estatal e internacional del desalojo de El Walili sigue creciendo y está llegando cada vez a más países la situación de los trabajadores migrantes del sector agrícola almeriense», han advertido para finalizar.