Sostenibilidad como clave de futuro

Una jornada en la que se habló de sostenibilidad empresarial desde el punto de vista de lograr una mejor y más eficiente gestión de la propia empresa, mediante herramientas y métricas, como la de la huella de carbono, la huella hídrica o la mejora de la eficiencia energética, pero también de sostenibilidad enfocada en lograr desde la empresa un impacto positivo social y medioambiental.

Así, conceptos como liderazgo para poder conseguir esa transformación, innovación no solo en la aplicación de tecnología, sino en transformar las organizaciones en modelos de empresa más abiertos, inclusivos y transversales, tecnologías naturales o servicios ecosistémicos fueron desgranándose durante toda la mañana, en una jornada dirigida por Juan José Amate, emprendedor social y consultor de sostenibilidad.

El primer ponente en tomar la palabra fue Guillermo Martínez Gauna-Vivas, fundador de Ayúdame3D, una entidad social que nació hace unos años con la intención de utilizar la impresión 3D para mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad o cualquier colectivo vulnerable. «Me fui a Kenia a un voluntariado y me llevé conmigo la primera prótesis que existe para personas sin codo, que no necesita electrónica, impresa en 3D, y que creé en mi habitación. Gracias a haber ayudado a cinco personas allí, vi que todo funcionaba muy bien y volví a España con la intención no solo de ayudar a personas de Kenia. Ahora estamos en 65 países y ayudamos de manera gratuita a más de medio millar de personas», explicó Martínez.

Durante su ponencia, además de contar sus experiencias, Martínez afirmó que «las empresas deben ser el motor de cambio de la sociedad y de cómo el consumidor consume. Las grandes empresas deben ser conscientes de que deben cambiar a unos hábitos mucho más sostenibles para que a largo plazo puedan seguir existiendo en el tiempo».

Por su parte, José Luis Guzmán, catedrático de la UAL y director de la cátedra Biorizon Biotech de Agricultura Regenerativa 4.0 habló de digitalización, automatización e Inteligencia Artificial (IA) como herramientas para la sostenibilidad, poniendo ejemplos positivos de su aplicación a la agricultura almeriense.

En materia de digitalización Guzmán apuntó a que «lo más importante es implantar un sistema de alta calidad para monitorizar la información». Un sistema de monitorización de datos que debe ser «robusto».

La última parte de la jornada correspondió a la mesa redonda formada por Javier Cabello, catedrático de la UAL de Biodiversidad y Ecosistemas, y Director del Centro Engloba que analizó cómo la agricultura puede aliarse con la naturaleza y cómo los servicios ecosistémicos son clave para impulsar modelos de agricultura regenerativa como ya se están dando en el interior y norte de la provincia.

«El gran paso para que la agricultura almeriense fuera realmente una gran secuestradora de carbono sería incorporar esa biomasa al suelo, para guardarlo a largo plazo», apuntó durante su intervención Javier Cabello.

María Negro, divulgadora de sostenibilidad y asesora, se centró en cómo realizar desde las empresas una buena comunicación de la sostenibilidad que permita llegar al consumidor. «La honestidad y la transparencia son valores clave a la hora de contar lo que hacemos», comentó Negro, quien añadió que «una de las claves es saber a quién te estás dirigiendo. Para hablar con un consumidor final hay que ponerse en su piel, saber que no tiene porqué tener conocimientos técnicos ni científicos».