Buscan dónde ubicar a las familias que han ocupado garajes en El Puche Sur

Concretamente, en el día de ayer se pusieron las bases para encarar de manera conjunta y coordinada el problema del barrio que a día de hoy más inquieta a estas administraciones: la realidad de unas 65 familias que han hecho de unos garajes y cerramientos insalubres sus domicilios.

La situación se vive en El Puche Sur, donde estos trasteros, pertenecientes a una promoción pública de viviendas de la Junta, han sido a lo largo de los años ocupados irregularmente por parte de personas, en su mayoría inmigrantes, que no han dudado en instalares allí en condiciones infrahumanas y, además, con menores a su cargo. Fue una visita del Defensor el año pasado lo que hizo dar la voz de alarma. Abrió una queja de oficio cuya derivada es la celebración de reuniones mixtas que están encarando el problema de manera transversal. Con pies de plomo, los representantes que se sentaron ayer en una de las salas de Alcaldía no quisieron precisar cuáles son las medidas que se han puesto por el momento sobre la mesa. Si bien, sí que destacaron la colaboración existente entre todas las administraciones, cuya voluntad es «mejorar la calidad de vida» de los habitantes de El Puche, en palabras del alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco.

Alternativa habitacional

Los garajes ocupados irregularmente son de titularidad autonómica, por lo que corresponde a esta Institución, como propietaria, iniciar los procesos de desahucio ordenado de estas personas. El problema es que la mayoría son familias con menores y es por esto que se les está buscando una alternativa habitacional.

No será fácil, pues la lista de personas que esperan ser realojados en viviendas públicas de la Junta es larga, circunstancia a la que hay que añadir que varias de estas personas podrían encontrarse de manera irregular en España.

Mientras se concretan medidas en uno y otro sentido, de la reunión de ayer se arrancó el compromiso de crear una comisión entre las tres administraciones para coordinar un calendario de actuaciones a través de mesas de trabajo en las que se dará entrada a colectivos vecinales del barrio. Al respecto, este trabajo servirá además para abordar otros problemas en El Puche, que hay bastantes.