El Lucas reivindica la importancia de la salud mental al ritmo de Shrek

Llegó el Lucas pasadas la una de la tarde a la plaza de Derecho (la facultad cerró el portón grande). Antes había estado en el Espacio V Centenario. Batas y pijamas hospitalarios estaban pintarrajeados. A los universitarios de primero, directamente no se les veía la cara porque en la placeta Galdo Villegas les habían embadurnado con todo tipo de pinturas y purpurinas.

Daniel, que era el estudiante de cuarto curso, que encarnaba al Lucas se dirigió a sus compañeros desde una plataforma, situada delante de la estatua de Carlos V y les dijo: «Nadie dijo que fuera fácil, pero es que a nosotros nos gustan las cosas difíciles. Que somos la promoción maldita nadie lo duda, una selectividad con covid y unos primeros meses de telecole casi nos vuelven locos».

Los estudiantes de cuarto empezaron la carrera de Medicina en el curso 2020-2021. A ellos no los pintó nadie porque ese año no hubo celebración por la pandemia. Por eso, han elegido este 2023 disfrazarse de los personajes de Shrek porque en 2020, de haberse podido hacer, hubieran elegido esta misma temática «nuestros veteranos». Aquellos estudiantes ahora están preparando el MIR, para ellos tuvo palabras de aliento y suerte.

En la ciénaga no faltaba ayer de nada ni nadie, por estar estaban hasta algunos padres y madres de estudiantes. Asno, gato con botas, lobo y demás personajes desfilaron entre batas y pijamas. Las Fiona de turno (con zapatos último modelo de la temporada en algunos casos) se esmeraban de un lado para otro. Y todos los personajes tuvieron su papel en el teatrillo que representaron en las escalinatas del Espacio V Centenario. Eso fue pasadas las diez de la mañana. Antes, habían estado en los jardines del Triunfo. El Lucas, Dani, para los amigos, contó que desde mayo están organizando la celebración de este martes. Ha puesto cada estudiante de cuarto setenta euros. Ese dinero esperan recuperarlo con actividades que organizan. El dinero que les sobre, si es el caso, lo destinarán al viaje de estudios que será a la Riviera Maya.

Dani, que vino a la Universidad granadina, porque no pudo estudiar Medicina en Murcia, defendió que lo de ayer «no son novatadas, sino una bienvenida» a los de primero. Y a la 'fiesta' se suman todos. El joven, que es de Cartagena, reconocía que le costó decidir venir a Granada, pero pronto se sintió en casa y ahora les desea a los de primero que les suceda igual.

En el discurso del Lucas, antes de volar, se dirigió a todos los cursos y a los MIR. Repasó anécdotas de estos años. Vivencias en la cafetería de la Facultad de Medicina, en el PTS. Y también hubo espacio para la reivindicación. La principal fue la salud mental, un «tema al cual le damos cada vez más visibilidad, pero en el que aún nos falta mucho camino por recorrer, la importancia de la salud mental». Y añadió: «La salud mental en la vida, y en particular en el estudiante de Medicina, es un tema que merece toda nuestra atención. La salud mental es un pilar fundamental de nuestro bienestar y calidad de vida, y en nuestro caso, como futuros médicos, su relevancia es aún mayor». Aconsejó pedir ayuda. «No estáis solos», subrayó.

La música y los cánticos acompañaron a estos jóvenes durante toda la mañana. Y, por supuesto no faltaron los gritos de: «Eo, eo, eo Derecho es un paseo». «Dónde están los borregos, los borregos donde están?, entre otros.

Dani, ayer Lucas, se dirigió a los de primero porque «queremos deciros que tenéis nuestro apoyo, que nos pidáis ayuda si la necesitáis y al resto os pido que contéis con ellos y que los integréis como uno más ya que todos soñamos con lo mismo, ser médicos».

La 'fiesta' de Medicina estuvo ayer, un año más, lejos de la facultad, que está sita en el PTS.