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Entre Linares y Úbeda está el Puente de Ariza, obra cumbre de ingeniería civil de Andrés de Vandelvira, figura clave del renacimiento español, pero solo es posible verlo en contadas ocasiones
El Puente de Ariza reaparece gracias a la sequía

El Puente de Ariza reaparece gracias a la sequía

Se proyectó su traslado hasta un emplazamiento rural a 10 kilómetros al norte de Úbeda, de uso peatonal, entre olivos y en las cercanías de la ermita de Nuestra Señora de Guadalupe

ana sola, efe

Viernes, 18 de diciembre 2015, 15:40

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Entre Linares y Úbeda está el Puente de Ariza, obra cumbre de ingeniería civil de Andrés de Vandelvira, figura clave del renacimiento español, pero solo es posible verlo en contadas ocasiones y ahora es una de ellas gracias a la sequía, ya que en 1998 quedó sumido bajo las aguas del embalse del Giribaile.

En los últimos años han sido muchas las voces que han pedido la recuperación de este bien de interés cultural, especialmente en elecciones, pero los cambios de competencia de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), propietaria del terreno, y la falta de dinero por la crisis no les han ayudado.

De hecho, en 1997 el Ministerio de Medio Ambiente aprobó el proyecto de su traslado, piedra a piedra, con un presupuesto de 800 millones de las entonces pesetas, más de 4,8 millones de euros, en lo que se anunció como su salvación.

Se proyectó su traslado hasta un emplazamiento rural a 10 kilómetros al norte de Úbeda, de uso peatonal, entre olivos y en las cercanías de la ermita de Nuestra Señora de Guadalupe, tomando como antecedente el desmontaje y nuevo montaje del puente romano de Alconetar (Cáceres).

En 2010 las protestas se reavivaban por una queja de la Plataforma por Andalucía Oriental, enviada a los representantes de Jaén en el Parlamento de Andalucía, sobre la situación de "abandono" en el que se encontraba y en la que se advertía de que, si no se trasladaba el puente, atacado por la humedad, acabaría destruyéndose.

La Junta de Andalucía, que acababa de recibir las competencias sobre la CHG, se comprometía a retomar el compromiso de traslado del puente, solo a la espera de que se normalizase la situación del pantano de Giribaile entonces con agua.

Pero un año después la Junta revertía sus competencias sobre el Guadalquivir al Gobierno central al no haber logrado un acuerdo sobre la transferencia de esta cuenca, y además llegó la crisis, con lo que su traslado no fue considerado un hecho preferente.

Ahora, el Puente de Ariza se encuentra en la lista roja del patrimonio de la Asociación Hispania Nostra, por el deterioro progresivo que sufre.

Y este monumento, construido por iniciativa del Concejo de Úbeda para mejorar la comunicación de Andalucía con el Levante y La Mancha a través de la comarca del Condado, podría acabar definitivamente derruido bajo las aguas del Giribaile, desapareciendo así uno de los ejemplares más importantes dentro de su género en el panorama artístico español del siglo XVI.

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