Duarte, con una opción de salida a través de una 'cesión forzosa'

El Granada pagó tres millones por su fichaje en 2019, firmándolo por cuatro temporadas, con un 20% de futura venta para su club de procedencia, el Sporting de Portugal. En caso de descenso, se contemplaba una cesión obligatoria por una contraprestación que cubriera la amortización anual del fichaje, cercana al millón de euros. El problema es que, al estar en en el último ejercicio con vinculación, el préstamo supondría perderle sin recuperación, de ahí a que esta fórmula se convierta, de facto, en una venta obligatoria.

El jugador, por su parte, ha alargado sus vacaciones al haber estado con su selección tras la Liga, por lo que no se ha incorporado a los entrenamientos, pero ya había iniciado su mudanza antes de empezar los días de asueto. Es posible que él no se acoja a ella para intentar que el Granada saque algo más dinero por su traspaso, de manera que ayude a la entidad con una salida negociada. Esto, por ejemplo, ha pasado con Darwin Machís.

El préstamo de Domingos, con la contraprestación fijada, requiere del visto bueno rojiblanco en cualquier caso, con plazo de aprobación hasta final del mercado veraniego. La cuestión es si, una vez descubierto, Domingos forzará esta alternativa para el club que le quiera o aguardará a que el Garnada logre pactar algo más. La entidad, en este caso, solo puede retrasar el acuerdo hasta el 1 de septiembre, pero no detenerlo.