MercaGranada solicita al Gobierno que la Policía garantice el abastecimiento

El mayor impacto de la protesta se produjo en MercaGranada, donde la actividad se paralizó prácticamente por completo, una situación que no se había visto en años y solo comparable a las de las huelgas generales.

El paro secundado por centenares de camioneros autónomos hizo, por una parte, que muchos de los camiones proveedores que cada día entran a MercaGranada a servir mercancías no salieran a trabajar y se quedaran aparcados. Con esa situación contaban en MercaGranada, pero no con que las furgonetas de los que llegaban a comprarles a ellos –los detallistas, fruterías, pescaderías o supermercados de toda la provincia– también tuvieran problemas para entrar, lo que provocó la indignación de los mayoristas.

La presencia del piquete disuasorio que hizo guardia desde la madrugada en la entrada del operador logístico hizo que los camiones proveedores que sí trabajaron y la mayoría de las furgonetas de pequeños negocios que acudían a comprar optaran por darse la vuelta o no entrar.

La actividad se paralizó y en MercaGranada no recibieron ni una parte mínima de los 2.200 camiones y vehículos que entran y salen cada día, según fuentes del operador logístico.

Mientras los mayoristas de frutas tenían los almacenes llenos porque cargaron el pasado sábado, adelantándose a la situación, en el caso del pescado, producto más perecedero, no tuvieron nada que vender, al no entrar ni un camión proveedor. La nave del pescado de MercaGranada donde actividad comienza antes de amanecer, estuvo ayer totalmente parada. No salió ni un kilo de pescado, con el consiguiente efecto en pequeñas pescaderías de barrios y pueblos.

«No nos han dejado entrar y hoy no he tenido género que vender, hemos sacado lo que nos quedaba refrigerado. A ver qué pasa mañana», comentaba un pescadero de un pueblo de la provincia.

Los camiones y furgonetas de los negocios que mostraban su intención de entrar a MercaGranada pudieron hacerlo solicitando la escolta de los vehículos de la Policía Nacional, pero la presencia del piquete tuvo un efecto disuasorio y bien por solidaridad o por evitarse problemas fueron pocos los que intentaron acceder al recinto.

Durante la mañana, IDEAL pudo comprobar cómo algunos propietarios de tiendas y supermercados de la provincia utilizaban sus vehículos particulares para entrar a cargar género en MercaGranada y llenaban sus maleteros, para evitar el desabastecimiento de sus tiendas.

La Policía Nacional mantuvo la vigilancia tanto en MercaGranada como en todos los puntos calientes de esta protesta, principalmente los polígonos y los centros logísticos de empresas de la provincia, donde actuó la Guardia Civil. Por fortuna, no se registraron incidentes ni enfrentamientos de gravedad como en otros puntos de España.

En Motril, los transportistas que participaban en los piquetes informativos mantuvieron bloqueada durante horas la entrada de camiones a los almacenes portuarios de la compañía de hidrocarburos CLH, que abastece de combustible a varias provincias de Andalucía. Finalmente, tras horas de espera, fueron saliendo escoltados por la Policía Nacional.

También en la plataforma logística de Covirán hubo un piquete que hizo guardia permanente y aunque no se paró a los socios de la cooperativa de alimentación, que pudieron retirar mercancía con normalidad para sus supermercados, sí se vieron afectados los camiones de distribución a otros almacenes de la cadena lo que empieza a provocar «leves problemas».

En Mercadona, los piquetes bloquearon durante la noche el centro logístico de Guadix y provocaron «retrasos» en la llegada de mercancías, aunque no desabastecimiento, según fuente de la cadena. Los transportistas, que secundan el paro convocado a nivel nacional por la Plataforma en defensa del sector del transporte de mercancías por carretera, mantendrán la protesta para que el Gobierno atienda sus demandas para dar rentabilidad al sector y garantizar que no se permita trabajar por debajo de los costes de explotación.

Los camioneros negaron que se esté coaccionando a otros transportistas que no están secundando el paro «muchos de ellos asalariados que se ven obligados».

«Solo estamos informando, a los que han entrado solo les hemos aplaudido», aseguraban los camioneros apostados a las puertas de MercaGranada, que recordaron que mantienen un paro indefinido porque han llegado al punto de «no poder vivir de su trabajo».

Los negocios de MercaGranada que se vieron directamente perjudicados por la protesta mostraron su indignación porque el piquete «impidiera» la entrada de sus clientes.

Desde la dirección de MercaGranada remitieron cartas a la Alcaldía de Granada y a la Subdelegación del Gobierno para solicitar que la Policía Nacional intervenga hoy miércoles, en la tercera jornada de paro, para desbloquear la entrada del operador logístico y dar garantías a los que quieran trabajar.

«Las 110 empresas que trabajan en MercaGranada cumplen un servicio esencial y se les está impidiendo trabajar. Lo de esta noche ha sido una vergüenza, se ha paralizado todo y no han dejado entrar a los mayoristas. Se ha impedido que entrase pescado y que llegasen los compradores. Es un desastre», lamentaba el director comercial de MercaGranada, Julián García.

«Vamos a tener un problema social grave si no se toman medidas. Los transportistas que hacen huelga estarán defendiendo el pan de sus hijos, pero se lo están quitando a los que trabajan aquí y a los miles de detallistas que compran», resumió García.

Por su parte, el presidente de la Asociación de mayoristas de frutas de MercaGranada, Alejandro López, incidió en que apoyan las reivindicaciones de los trabajadores del transporte y las demandas que les han llevado a este paro, pero pidió que la protesta se ejecute de una manera «razonable» y no se perjudique al pequeño comercio.

López explicó que desde que comenzó el paro, se cortó el abastecimiento de género de muchos productores por la huelga de transportistas. «Sin embargo hoy al pequeño minorista se le ha parado también y esto no está ocurriendo en otros mercados», lamentó.

«Si esto sigue así el pequeño comercio no va a poder abastecerse en Granada. Que quede claro que a nivel de asociación estamos de acuerdo con la huelga de transportes, pero no con que al pequeño comercio que se abastece en MercaGranada no se le deje trabajar. Si la huelga se hace bien, si no se carga en origen, al final faltará en destino, pero lo que no podemos permitir es que falte fruta solo para los pequeños, mientras que a las grandes cadenas no les falta porque sus camiones salen escoltados por la Guardia Civil», concluyó López.