Condenan al conductor ebrio que circuló por el metro de Granada a ocho meses sin carné y una multa
No es la primera vez que pierde este ciudadano el derecho a conducir
Carlos Morán y Jose R. Villalba
Granada
Sábado, 29 de enero 2022, 15:32
El Juzgado de Instrucción número 1 de Granada, en funciones de guardia, ha celebrado este sábado un juicio rápido saldado con conformidad, por la que ... el conductor ebrio que circuló por todos los túneles del metro ha sido condenado al pago de una multa de 720 euros.
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También ha sido privado del derecho a conducir vehículos a motor durante ocho meses. Ambas penas son por un delito contra la seguridad vial por conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
No es la primera vez que pierde este ciudadano el derecho a conducir. Le constan distintos antecedentes contra la seguridad vial y en 2013 le retiraron el carné de conducir por puntos debido a las distintas infracciones de tráfico cometidas.
El suceso
La Policía Local de Granada interceptó la madrugada de este pasado viernes a este vecino de la capital que circuló ebrio con su coche a lo largo del todo el tramo subterráneo del metro, esto es, por los túneles que unen la Avenidad de América con los paseos universitarios de Fuente Nueva.
En total, más de tres kilómetros de un viaje disparatado. Por fortuna, la intrusión se produjo pasados unos minutos de la una de la noche, cuando los trenes ya habían dejado de transitar. La insólita peripecia fue grabada por las cámaras del metro.
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El individuo en cuestión entró con un turismo Opel Astra de color gris por el túnel del metro de la Avenida de América, en el barrio del Zaidín, y salió por el 'vomitorio' de Fuente Nueva, cerca de la escuela de ingenieros de Caminos. Recorrió más de tres kilómetros por el subsuelo de la capital.
Fueron los vigilantes de la Universidad de Granada quienes dieron la voz de alerta, tras ver a este conductor en las vías del metro cerca de la parada de los paseíllos de Fuente Nueva. La Policía Local acudió entonces a la zona para comprobar qué había ocurrido.
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Lo primero fue someter al conductor a una prueba de alcoholemia en la que arrojó un resultado de 0,93 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, la primera vez, y 0,89 en la segunda. Le faltó muy poco para cuadriplicar la tasa de alcohol permitida.
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