Unicaja Costa de Almería se fue de vacaciones unos días antes de lo previsto

El equipo almeriense fue de más a menos ante un rival que sí que demostró en la primera vuelta en Almería ser un equipo difícil con un comportamiento un tanto extraño en sus compromisos como local, pues sí es cierto que fue capaz de ganar a Melilla (3-0), pero perder frente a Arenal Emevé Lugo. Y que ganó para firmar una sorpresa, porque en voley los escalones se notan si se hacen las cosas bien. Pero, realmente, no es de recibo que falle la logística para hacer viajar al equipo almeriense el mismo día de celebrarse el partido, no tener ni siquiera la posibilidad de 'tantear' la pista, extraña para algunos jugadores blanquiverdes, cuando el voley es un deporte de referencias en el que influyen la luz, la publicidad y hasta las líneas que delimitan la pista.

De este modo, el equipo jugó en inferioridad en el Polideportivo de la Universidad Politécnica de Valencia, pese a un excelente comienzo, pero con error. Pese a todo, fue muy efectivo en ataque, con un 70% de efectividad, con 16 de 23 ataques, sólo un balón bloqueo y cinco balones defendidos por los valencianos. Además, se jugó con buen saque. Léleman Conqueridor firmó un 50% de eficacia en recepción positiva, pero sólo un 14% en la excelente, lo que hizo que Unicaja Costa de Almería pudiera hacer buena lectura defensiva para manejar la bola separada que siempre atacó el conjunto de Marcos Dreyer.

Sin embargo, a partir de ahí, el equipo almeriense cayó en picado. Si se ven los números, hubo menos incidencia del saque. El equipo valenciano jugó muy cómodo. Con el 86% de recepción, aunque el 14% de excelente le impidiera jugar con superioridad, atacó siempre a zona de difícil capacidad defensiva de los de Carlos Carreño, que tiraron una ventaja de dos puntos (18-20) para verse 'desbordados' en el tramo más importante del set, con tres errores en ataque, tres puntos directos encajados y seis concedidos en saque, además de no conseguir frenar en bloqueo al conjunto valenciano.

Tan es así, que los dos sets posteriores reflejaron un descenso en la capacidad de hacer buen juego. En el tercer set, se fue a un 44% de ataque, con tres puntos de bloqueo recibidos, dos errores en ataque, dos en saque y con Léleman Conqueridor yéndose a un 61% de eficacia en ataque, sin fallo, salvo los dos puntos directos encajados y los cinco errores cometidos al saque, pero con dos puntos directos firmados.

Las vacaciones empiezan ya y de lo sucedido debe tomarse nota para que no se vuelva a repetir, al menos lo que debe controlar la entidad porque, de otro modo, el enemigo estará en casa. Sí es cierto que habrá que 'rectificar' esa sinergia de desconexión que sufre el equipo, que pierde su tercer partido tras haber empezado imponiéndose en los tres partidos en los que encajó la derrota.

Queda ahora tiempo para la reflexión, con las vacaciones navideñas en las que desconectar de una primera vuelta en la que ha dejado sensaciones de ser un equipo con capacidad para pelear por los títulos, si bien es cierto que Guaguas Las Palmas sigue siendo favorito, pero esto es deporte, en lo que no hay nada escrito. Lo único que se sabe es que el siguiente partido será el día de Reyes, en el Pabellón Moisés Ruiz, ante Conectabalear Manacor, ante el que ganar el primer partido de 2024.