Unas fotografías que debían salir del baúl: 'Manuel Falces. El Alquimista de la Memoria'

Ya el año pasado por estas fechas, se hizo una retrospectiva de Manuel Falces que ocupó todas las salas del CAF, fechas en las que iba a salir el libro. Pero con la pandemia se ralentizó, por lo que finalmente se fue dejando para que saliera en una mejor época.

Ya no se ha hecho esperar. Ha sido la Universidad de Almería, que hace ya unos años comenzó una colección sobre fotografía conocida como 'Cámara Lúcida', del que es este el tercer libro de la colección en colaboración con la Fundación Manuel Falces.

Un libro que Matilde Sánchez cree necesario para entrar en las obras. Sobre todo, para la gente joven que no estuvo en su época de esplendor y, entre otras cosas, porque es una obra imperecedera y de completa actualidad, puesto que en su tiempo fue puntera y adelantada gracias a las múltiples técnicas fotográficas con las que experimentó en aquella época en la que no existía Photoshop y primaba la técnica.

Un libro de más de 300 páginas en el que se aproxima a su obra haciendo una recopilación de la trayectoria fotográfica, las técnicas que utilizó y sus textos sobre fotografía, muy descriptivos y en los que están también definidos su obra y sus formas de hacer.

Hubo una época en la que Falces no colocaba ni fechas ni títulos a las piezas, puesto que quería que llevaran esa atemporalidad, pero posteriormente sí que hubo un momento en el que requirió del uso de la palabra para enriquecer las fotos.

Cualquiera de sus textos es acoplable y extraíble a cualquiera de sus proyectos, que pueden ir combinando las piezas. Toda la obra tiene un nexo, un hilo conductor y una coherencia. Sánchez Imberlón trabajó con él toda su vida y se considera y es coautora de la obra, pues ha trabajado en todas y cada una de ellas, por lo que se ve obligada a ponerlo en valor otra vez. Cree que la gente que lo conocía entonces lo encasilla como crítico de El País, donde escribió más de 600 artículos de fotografía.

En aquellos tiempos apenas se veía fotografía en revistas especializadas y en prensa general alguna vez se hablaba de esta ciencia, pero para anunciar exposiciones o libros, nunca en las secciones de arte.

Ese era uno de sus grandes empeños, a lo largo de la carrera Falces. Una obra que la Fundación Falces ha puesto a disposición de la sociedad, pues «era un crimen que eso se quedará en los baúles», señala Imberlón.

Aunque todavía queda mucho trabajo por hacer, pues se trata de una vastísima obra, la que estaba producida, de lo que nació la exposición del año pasado y toda la obra que sigue inédita o de la que tan solo se ha enseñado parte.

A través de esta se contempla la historia de la fotografía española desde finales de los sesenta a principios de los setenta, las distintas tendencias, las maneras en las que se fue acoplando para ir por delante e innovando. El libro es un resumen biográfico que se ha dividido en capítulos, esta selección intenta reflejar toda la trayectoria y las distintas formas de la fotografía que él realizó. «Francamente, estoy bastante satisfecha con el libro, si no, no lo hubiera publicado», bromea. «Ahora hace falta que la pretensión de llegar a los demás se cumpla».

La Universidad de Almería ha colaborado poniendo a su disposición la editorial, cuyo director, Miguel Gallego, ha sido muy receptivo con la obra. En el libro también escriben el fotoperiodista y amigo Ricardo Martín, que estuvo con él en sus inicios en Granada en las primeras exposiciones, a modo de epilogo; Ángel Sánchez-Harguindey, que realiza un texto a modo de prólogo; por medio se encuentran otras citas de personas que han significado mucho a lo largo de su vida, un texto de Pablo Juliá que publicó en la Asociación de la Prensa cuando se fue, alguna cita a Fernando García Lara, que contaba sus hazañas con Valente en Valente Vital, o Llorens Reig, que estuvo en una actividad de la exposición junto a Fernando García Lara y Ramón de Torres hablando sobre Falces y escribiendo su libro 'Poética Fotográfica', donde le dedicó el epílogo entero a 'Para siempre: la sombra', de donde se extraen algunas citas.

También fotógrafos como Alberto Shommer, Jorge Rueda, Carlos Pérez Siquier o Víctor Steinberg, que estuvieron en 1984 con Juan Carlos Asián en un programa de radio en Antena 3 que se llamaba 'Fotografía, yo te amo', cuyo último programa le hizo un homenaje sorpresa en el que se pusieron al teléfono los autores citados previamente, dedicándose un capítulo a un extracto de esas conversaciones acompañados de una foto que hizo Manuel de cada uno de ellos.

Todo el que aparece es muy significativo en su trayectoria. Matilde Sánchez Imberlón ha dedicado toda su vida a trabajar junto a Falces y a continuar con su legado ahora que ya no está. Sus libros los ha escrito ella, el laboratorio, la confección de los libros, las exposiciones; por ello no se ha visto con más remedio que publicar este recopilatorio, que además viene acompañado de un cuento que se llama 'El alquimista' que ha escrito Mar de los Ríos, que formó también parte de «nuestra vida», pues de muy pequeña posó para la cámara de Manolo y, en muchas de las colecciones y fotografías, la protagonista fue la Mar de Los Ríos de siete años. Ahora, al ser novelista, quiso colaborar con este cuento de realismo fantástico.