Álvaro Morte sobre el discurso de Úrsula Corberó: «Ha hecho muy bien, estoy completamente de acuerdo»

–¿Cómo se siente tras el aluvión de cariño recibido en Almería?

–Absolutamente arropado y lleno de cariño. Tras haber hecho una comparecencia cómoda e ir al Paseo de la Fama, he visto a toda la gente mostrándome su cariño, así que he intentado devolvérselo también, les he firmado y me hice fotos. Al fin y al cabo es por ellos que yo estoy donde estoy, ¿no? Hay que agradecerlo.

–¿Qué le ha transmitido el público?

–Me han dicho cosas muy cariñosas, lo que más me impacta es cuando me dan las gracias por el trabajo hecho y no cuando te dan la enhorabuena por un trabajo que hayas hecho. Es como una especie de pequeño reconocimiento, pero cuando te agradecen, hay un componente que va más allá. Una vez en Madrid una señora se me acercó y me dijo muchas gracias, no quiero foto ni autógrafo, nada, solo darte las gracias porque gracias a una de tus series, nos hemos vuelto a reunir toda la familia delante de la tele y hemos vuelto a hablar entre nosotros y hemos vuelto a tener contacto entre nosotros. Es muy bonito.

–Su nombre completo es Álvaro Antonio José García Pérez. ¿Por qué Álvaro Morte?¿Sintió que si no lo cambiaba no podía destacar como actor?

–Mi apellido es García, muy común en España. Entonces, yo me puse a investigar y Álvaro García ya existía; un chico que, como yo, queríamos ser intérpretes, y dije, pues habrá que cambiarlo, y surgió el apellido Morte.

–Le gustó cómo sonaba Morte...

–Sí, me sonó bien. La primera vez que lo escuchas es como: '¿Cómo que Morte? Pero si esto es muerte, ¿qué me estás contando?'. Pero cuando lo escuchas tres veces, se quita la connotación.No sé si ha sido mera casualidad, pero desde que lo cambié las cosas me empezaron a ir un poco mejor.

–Su pasado está marcado por unos inicios y primeras apariciones en series hasta que dio el salto con una película de Lola Flores. ¿Cómo fue el cambio de serie a película?

–Hay un cambio a la hora de enfrentar el trabajo. En una película tienes todo lo que va a pasar, el guion entero. En una serie es muy difícil que tengas todo y en el caso de que tuvieras los guiones de una temporada, luego puede haber una segunda o tercera temporada y no sabes hacia dónde va el personaje.

–¿Diría que ambas partes tienen cosas buenas y malas?

–Ambas partes tienen cosas buenas y cosas malas, sí que es verdad que puedes hacer una cosa como muy coherente con una película porque tienes toda la información, pero también cuando haces una serie y has conformado un personaje y te sorprende, el guion que pensabas que era de una forma, de pronto, lo harás de una completamente distinta. Y ahí está el trabajo como actor, porque eso también lo puede llegar a ser tu personaje. Son dos aproximaciones muy distintas.

–¿Hay algo de personalidad de Álvaro Morte en los personajes que interpreta?

–Jamás. Otra cosa es que coincida y haga, por ejemplo, a un personaje que sea estupendo y yo, que soy estupendo, podamos coincidir en eso. Pero analizo a los personajes de forma racional y cerebral. No busco jamás dentro de mi memoria emocional.

–Si tuviera la oportunidad de ser director de una película o serie... ¿Almería entraría en las localizaciones para el proyecto?

–Mira, yo tengo un cortometraje escrito que quise dirigir y, por cuestiones de la vida, no se pudo. Habría sido perfecto localizarlo en Almería. Esta tierra tiene algo, si vienen de tantas partes del mundo para rodar aquí, esto no es gratuito, es por alguna razón. Más allá del paisajismo almeriense, el trato de la gente, cómo nos recibís, cómo nos abrazáis para poder formar parte de Almería... Hay algo. No creo en estas cosas, llámalo energía o como quieras, pero me encantaría rodar aquí más veces.

–¿Ha perdido el miedo a ser rechazado de un casting?

–No, a lo que sí puedo tener es más rechazo a repetirme. Si me ofrecen cosas que ya he hecho, puede que no las haga, o intento buscarme las vueltas para transformarlas en cosas que no haya hecho antes.

–Confesó una vez que el terror le aterra como espectador, pero se puede ver en 'Inmaculate', un film de terror psicológico...

–Exacto, el género de terror no me gusta verlo. No es el que me pondría yo en mi casa un jueves por la noche. Pero bueno, hacerlo es muy divertido. Porque como sabes que es todo mentira, el juego va más allá.

–¿Hay algún género en el que se sienta cómodo?

–No hay ninguno en especial. Es verdad que yo soy muy chorras. Porque soy muy chorras. Y a mí la comedia me encanta. Pero no me dan comedias. O sea, no me ofrecen muchas... Pero a mí la comedia me encanta porque creo que es lo más difícil de hacer. Considero que hacer llorar es mucho más fácil que hacer reír. Y me parece que es un reto hacer una comedia.

–Úrsula Corberó recibió el Premio Ondas por su interpretación en 'El Cuerpo en Llamas' y se lo autodedicó. ¿Los actores necesitan más autorreconocimiento propio?

–Siempre nos empeñamos en ser muy modestos, que está muy bien. La humildad siempre es un valor y considero que hay que serlo. Pero Úrsula ha hecho muy bien, también, sabiendo reconocerse públicamente y decir: 'Oye, que a lo mejor darme yo a mí misma una palmadita en la espalda de vez en cuando está bien hecho' y no pensar: 'No, bueno... no... yo no'. Se lo merece de forma estupenda, porque es una serie espectacular, a disfrutarlo y adelante. Estoy completamente de acuerdo con lo que ha dicho, más que merecido porque se dará una palmadita a sí misma por haber sido valiente y audaz a la hora de haber cogido el personaje, que al principio dudaba.