El Nudo de Viator, de 200.000 metros cuadrados, será el mayor de la provincia
Los trabajos se basan en crear cuatro ramales a la A-7 y la A-92 en una extensión de dos kilómetros
Cuatro ramales, dos vías rápidas -la A-7 y la A-92-, cuarenta trabajadores que, cuando la obra esté en todo su auge serán un ... centenar, y dos glorietas son los grandes números del Nudo de Viator; un proyecto de más de 32 millones de euros que corre a cargo del Gobierno de España y cuya ejecución ya es plenamente visible desde la autovía.
Cuando el 20 de septiembre de 2025 esté concluido, según el compromiso de la empresa adjudicataria, el Nudo de Viator, que se extenderá por unos dos kilómetros y 200.000 metros cuadrados, se convertirá «en el mayor enlace de la provincia», diseñado para «aumentar, más que duplicando, su capacidad», tal y como describió ayer José Lorente, director de la obra, que acompañó al delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, durante un recorrido por el que serán los futuros viales de este entramado cuya principal finalidad será ordenar la circulación en un viario que da servicio a los municipios de Almería capital, Huércal de Almería y Viator, además de la base militar de La Legión, varios polígonos industriales y superficies comerciales.
Así, se logrará, principalmente, reducir los atascos que se producen sobre todo en la salida de Viator desde Almería, con colas de vehículos obligados a apartarse en el arcén para poder salir de la autovía.
De momento, tal y como pudo comprobar 'in situ' el representante gubernamental en la comunidad andaluza, los trabajos se encuentran al 10% de ejecución.
Tras algo más de un año desde que dieron comienzo las primeras actuaciones de este proyecto, las obras se centran actualmente, una vez realizados los desvíos de servicios, en los movimientos de tierra necesarios para crear los viales que confluirán posteriormente en estas dos importantes vías rápidas que conectan Almería con Málaga, Murcia y Granada.
Los nuevos enlaces, expuso ante los medios de comunicación el delegado del Gobierno, «se van acotando hasta que llegue el momento en el que, en torno al segundo semestre, según nos dicen los técnicos, del próximo año 2024, ya sí haya alguna que otra interferencia vinculada al tráfico de estas dos infraestructuras».
No obstante, tranquilizó Fernández, «se va a hacer con muchísimo cuidado», según le trasladó la concesionaria, la unión temporal de empresas Acciona Construcción SL y Construcciones Bonifacio Solís SL, que fue la adjudicataria del proyecto por 32,12 millones de euros. Todo ello, para «compatibilizar una obra de una gran envergadura, como es esta, que mejorará la capacidad, la seguridad y la movilidad de la A-7 con la A-92», pero que afecta a diferentes ramales con un gran volumen de tráfico.
«Esta es una obra que se inició hace, aproximadamente, un año y unos meses, que tiene un plazo de 36 meses de ejecución y cuyas previsiones de que, a finales del año 2025, esté acabada, siguen intactas», valoró el representante del Gobierno central en Andalucía.
Se trata, no en vano, incidió Pedro Fernández, de la conexión de dos grandes infraestructuras que atraviesan la comunidad andaluza, como es la A-7 y la A-92; y una obra «de las más importantes en cuanto a infraestructura viaria se refiere y de las que se están llevando a cabo en este momento en Andalucía, y no digamos en Almería como provincia». De hecho, abundó, es esta «sin duda de las más importantes, no solamente por el volumen de inversión que tiene la infraestructura viaria, que recordemos que supera los 32 millones de euros, sino también por la complejidad y, sobre todo, por las soluciones tan importantes que le va a dar a la movilidad, al tráfico y a la conexión o interconexión de tres provincias andaluzas, en el caso de Málaga, Almería y Granada y, por supuesto también, con la vecina Región de Murcia».
El delegado del Gobierno en la comunidad trasladó, asimismo, la relevancia de este proyecto «fundamental» para que «Almería tenga un potencial muy importante en lo que se refiere a la conectividad por carretera, resolviendo problemas que ya son históricos y que se producen precisamente en la zona en la que se está actuando, donde la retención de tráfico, que se produce especialmente en la propia plataforma de las autovías, tanto la A-7 como la A-92, origina en horarios punta retenciones importantes de tráfico».
Y es que, incidió, Almería es una provincia «donde el transporte de mercancías es tan sumamente importante, de vehículos pesados, que supone sin duda un trastorno y un retraso que afecta a la dinámica de las operadoras del transporte por carretera».
La solución que se va a dar a este nudo viario, por tanto, concluyó Fernández, va a «mejorar sustancialmente la movilidad y la conectividad en Almería, ayudando, qué duda cabe, al desarrollo social y económico» de las localidades a las que va a beneficiar.
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