Helado artesanal
Tiempo de verano, tiempo de helado artesanal en AlmeríaLlega el verano, y de su mano, el producto estrella que todos desean: los helados. Un dulce y refrescante placer que admite ingentes opciones y combinaciones de todos los sabores
David Roth
Almería
Domingo, 4 de agosto 2024, 13:11
En la provincia de Almería, los helados artesanales se han convertido en una experiencia gastronómica esencial, ofreciendo mucho más que un simple postre. La preparación ... de estas delicias heladas es un arte que combina ciencia y pasión, donde cada detalle cuenta para lograr una textura perfecta y un sabor inigualable. A diferencia de los helados industriales, los artesanales se destacan por su frescura, la calidad de sus ingredientes y la dedicación en su elaboración. Un helado artesanal es un equilibrio exacto entre sólidos, líquidos y aire, lo que permite que cada bocado sea una delicia única.
Por ello, IDEAL Almería ha embarcado la aventura de explorar tres destacadas heladerías artesanales de la provincia de Almería: Galatea Yogurtería, en Aguadulce, Helados del Desierto, presentes en toda la provincia, y Heladería Blu, que se sitúa en Mojácar. Cada una de ellas ofrece una experiencia distinta, pero comparten un compromiso común con la excelencia y la innovación.
Yogurtería Galatea
Javier Úbeda inició su viaje en el mundo del helado en 2013, cuando él y su ex pareja abrieron una yogurtería en el Paseo Marítimo de Aguadulce. El auge de las yogurterías fue el punto de partida, pero pronto se dieron cuenta de que el verdadero arte estaba en la heladería artesanal. Antes, había comenzado a experimentar con una heladera pequeña, compartiendo sus creaciones con su familia hasta perfeccionar sus recetas.
Ingeniero técnico de profesión, decidió formarse en la elaboración de helados artesanales, completando un curso de título universitario en Alicante. Esto le permitió entender las complejidades del helado.
Yogurtería Galatea se distingue por su enfoque artesanal, con especial énfasis en la importancia de entender los ingredientes y las técnicas de formulación. Los helados de Galatea no contienen aditivos industriales. Además, utilizan ingredientes naturales y de alta calidad, incluyendo opciones para diabéticos como sorbitol y maltitol.
El establecimiento es conocido también por su leche rizada, apta para aquellos que no pueden consumir azúcar;sus bubblewaffle, gofres rellenos de helado y toppings, y, sobre todo su yogur helado artesanal. Javier elabora su propio yogur, pasteurizándolo para garantizar un sabor único y adaptándolo cada año. Los clientes pueden disfrutar de más de 40 toppings, desde frutas frescas hasta productos de marcas reconocidas como Nutella y Conguitos.
Precisamente, parte del éxito de Galatea frente a las franquicias, muchas de ellas cerradas tras el paso del tiempo, es el uso de toppings de marca frente a las marcas blancas, opción por la que optaban los franquiciados para reducir costes. Esto también se extrapolaba al propio yogur helado, que traían liofilizado para tan solo tener que añadir agua para servirlo.
Helados del Desierto
Con casi una veintena de establecimientos que se reparten desde Aguadulce hasta San Juan de los Terreros, Helados del Desierto es un referente en la provincia. Juan Antonio Pérez, fundador de la empresa heladera con sede en Huércal de Almería, cuenta con 27 años de experiencia en hostelería. En su bar, contaba con la típica heladera industrial, con la que hacía las veces de helados para los clientes que así lo requirieran. Pero hace once años decidió que era la hora de dar un paso adelante, y eligió Italia para formarse en materia de 'gelato', conociendo así en profundidad su proceso de fabricación.
Arribó en este mercado en un periodo en el que lo sano primaba sobre el resto de productos. Motivado por la búsqueda de productos saludables, Juan Antonio comenzó a desarrollar helados sin aditivos ni productos como el aceite de palma y las grasas hidrogenadas.
Crear helados saludables fue un desafío, ya que eliminar aditivos complicaba la estabilidad del producto, que se derretía nada más colocarlo en las vitrinas. Sin embargo, después de años de pruebas y ajustes, Juan Antonio perfeccionó una base sin ingredientes artificiales con la que dio en el clavo. Este esfuerzo lo llevó a ganar el tercer lugar en el campeonato mundial de helados en 2017.
Helados del Desierto se enorgullece de utilizar frutas e ingredientes de la región de Almería. Por ejemplo, su helado de sandía es 100% natural, sin azúcar añadido, destacando el compromiso con productos frescos y locales.
Aunque los sabores tradicionales como fresa y vainilla son los más populares, Helados del Desierto ofrece opciones únicas como el helado de palomitas y aguacate. Uno de sus éxitos es la Delicia de Pistacho, que combina crema de pistacho con un ingrediente secreto para un sabor inigualable. Eso sí, hace hincapié en que los más pequeños deben evitar los sabores naturalmente ácidos como la fresa, pues «están acostumbrados a que les sepa a una fresa tipo Chupa Chups, y el helado tiene un sabor demasiado natural para los más pequeños».
Heladería Blu
La Heladería Blu es un negocio familiar que adquirió su actual administración el 1 de enero de este año. Con una historia de más de 20 años en Mojácar, Carlos Cervantes y Nieves Martínez, matrimonio que actualmente regenta el negocio, se han comprometido a mantener las recetas más tradicionales, pero introduciendo un toque de innovación.
Blu se caracteriza por su enfoque en productos naturales y la atención a las necesidades de los celíacos, puesto que su principal valedora y quién los elabora, Nieves, también convive con esta intolerancia al gluten. «Todos los helados y pasteles son sin gluten, asegurando que no haya contaminación cruzada», detalla la heladera. Además, se utilizan frutas de Almería en sus helados para mantener la frescura y naturalidad.
Cada día, Blu elabora sus helados frescos, ofreciendo una vitrina con 24 sabores que van rotando. Esto significa que los clientes pueden encontrar nuevos sabores cada vez que visitan la heladería. Entre los más populares se encuentran los Oreo, ricota con pistacho, chocolate blanco con pistacho, chocolate negro con naranja, Ferrero, Raffaello y tutti frutti. Este último es especialmente apreciado por los clientes mayores, que disfrutan de un sabor que les recuerda a su añorada juventud.
El matrimonio que regenta la Heladería Blu tiene una profunda pasión por el helado. Carlos ha trabajado en el sector de la hostelería durante 20 años y es un entusiasta del helado. Siempre que viajan, prueban heladerías locales para inspirarse y mejorar sus propias creaciones. «Preferimos probar heladerías a ver monumentos», relata Nieves a IDEAL. Una heladería que además se mantiene abierta durante todo el año, aprovechando el clima favorable de Almería.
Por si fuera poco, el establecimiento ha logrado un reconocimiento significativo, siendo la heladería número uno en TripAdvisor en toda la provincia. Este es un logro del que están orgullosos y trabajan continuamente para mantener y mejorar su posición, ofreciendo productos de alta calidad y un servicio excelente.
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