Fruit Attraction abre con Almería mirando a la pizarra y temiendo al virus rugoso
Más de medio centenar de empresas de Almería capitanean una de las delegaciones más numerosas del mercado agrario
Las cosas nunca son como empiezan, sino como terminan, Sin embargo, la campaña de 2023-24, recién iniciada, puede denominarse, así, nada más enchufar el ... motor, como la campaña de la incertidumbre, Más aún si cabe que todas las habituales y casi casi como la de la covid. ¿Por qué?Pues por varios motivos. El primero es el de los precios. La incertidumbre que ha generado la tabilla en productos como calabacín y pepino y que ha llevado a Hortiespaña a decretar la extensión de norma –la prohibición de comercialización de segundas gamas para facilitar la reacción de los mercados y el incremento de los precios– es el prólogo a una campaña desconocida: en la que las temperaturas están retrasando las fechas habituales y en la que los productores del norte están aguantando sus cultivos de forma sorprendentemente sostenida. «Europa podría aguantar las producciones, con las temperaturas actuales, hasta mediados de diciembre o incluso finales de año», comentaba ayer Antonio Bretones, presidente de la cooperativa CASI, la mayor empresa de comercialización de tomate en el continente.
La segunda es el incremento de la afectación de virus como el del trips parvispinus del pimiento o, muy especialmente, el virus rugoso del tomate, que tuvo afecciones severas en producciones de Marruecos y también en otras zonas productoras del país como la Región de Murcia. «La verdad es que da miedo, porque una entrada severa del virus en nuestros invernaderos podría mermar un 30% de la campaña de tomate», mencionaba una de las grandes comercializadoras de tomate en la provincia de Almería. «Es una situación preocupante, porque no hay semillas altamente resistentes a este virus en la mayoría de variedades de tomate», refería otro actor del sector, que se declaraba «muy intranquilo» por una situación que podría resultar determinante para la viabilidad completa de la campaña.
Estos dos ingredientes amargos para el cóctel se suman a otros dos más. Uno de ellos dulce: se espera una buena producción en las comarcas invernadas de Almería. Y la alta calidad del producto es un seguro de vida para su comercialización. El último, aún por catar: el comportamiento de la competencia. Marruecos ha reducido la producción de tomate por la afección severa del rugoso y ha migrado gran parte de su producción a pimiento y pepino, productos esenciales para el mercado almeriense en el continente europeo.
Aún se desconoce cómo puede desequilibrar un mercado internacional en el que este año Alemania y Holanda producirán con mayor facilidad una vez se ha normalizado el mercado gasista en el continente europeo. Pero está claro que ocurra lo que ocurra, el mercado almeriense de la agroalimentación será determinante: al fin y al cabo, no hay despensa más grande que la del sudeste peninsular.
Hasta tal punto es así que entre Almería, Murcia y Granada y sus sectores auxiliares, Fruit Attraction ni tan siquiera abriría sus puertas. Ayer lo hizo con un rotundo éxito en comercialización. Miles de personas abarrotaron los nueve pabellones y más de 60.000 metros cuadrados de suelo habilitados por la Institución Ferial de Madrid (IFEMA) para recibir la mayor feria hortofrutícola del sur de Europa y una de las mayores del mundo. Una muestra cada vez más internacional pese a la férrea competencia que supone la feria Fruit Logistica de Berlín. Entre ambas se reparten las campañas de invierno y de verano. Y sobre todo, demuestran la relevancia continental de la huerta mediterránea en los mercados de la alimentación y cómo Almería y su sistema de cultivos en invernaderos solares con minimización de consumo de recursos marcan la pauta.
Más de medio centenar de comercializadoras y empresas de la industria auxiliar (entre ellas, las 'big five', entre las que se encuentran Unica Group, Vicasol, La Unión, CASIy Agroponiente) dispusieron sus grandes puntos de contacto con la distribución continental de alimentos en el pabellón nueve, en el que se concentró todo el sector agroalimentario andaluz, si bien también se dispuso de espacio para otras empresas proveedoras de bienes y servicios en otros pabellones. «Es la primera vez que venimos y estamos sorprendidos», reconocía Isabel Alonso, que estrenó su presencia en la feria con un gran stand en el pabellón cuatro, en el que se concentró la actividad de las empresas logísticas de la agroalimentación.
El sector espera que la feria aporte grandes rendimientos y que permita hacer negocio: retomar los lazos con la clientela, programar y cerrar contratos para la temporada. Y, sobre todo, mantener el vigor del sector, que trae a esta feria novedades en semillas de gran relevancia y productos de cuarta y quinta gama que permitan incrementar el valor añadido de la producción agroalimentaria almeriense. Hoy mismo Unica Group, la principal comercializadora agroalimentaria de la provincia de Almería, presentará sus productos para vending: pequeñas tarrinas con tomates frescos o con zanahoria para untar en humus. Una gran novedad que debe permitir al sector de la agroalimentación competir con productoras de meriendas menos saludables en un quesito del mercado al que hasta el momento no se ha conseguido acceder.
La innovación, la minimización del impacto medioambiental y la limitación en el consumo de recursos son los elementos clave que permiten a Almería hablar desde arriba al resto de mercados de su entorno.
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