Desarticulada una red que explotaba sexualmente a mujeres

Según ha informado la Policía Nacional, hay 17 detenidos, entre ellos los propietarios y encargados de los clubes, quienes presuntamente también obligaban a las mujeres a ofrecer sustancias estupefacientes a los clientes, y estafaban a los hombres cargando a sus tarjetas de crédito servicios y consumiciones no realizados. Los beneficios obtenidos por la organización eran blanqueados a través de un entramado empresarial y reinvertidos en la compra y apertura de otros clubes.

La operación se ha saldado con la detención de 17 personas, ocho de ellos en la provincia de Málaga, cuatro en Almería, tres en Sevilla, uno en Murcia y otro en Ciudad Real. Los agentes han practicado dos registros, uno en un club de Dos Hermanas (Sevilla) --que ha quedado precintado por orden de la autoridad judicial-- y otro en un local de la provincia de Málaga, utilizado por la organización como oficina central de la cadena de clubes.

Además se han incautado de más de 6.000 euros en efectivo, documentación relativa a cada uno de los seis clubes de alterne de la cadena, documentos bancarios y actas notariales de apoderamiento de empresas, equipos informáticos, terminales móviles y otros dispositivos de almacenamiento de memoria que están siendo analizados por expertos.

La investigación comenzó en marzo de 2016, a raíz de las denuncias presentadas por varias mujeres que aseguraron a los agentes ser víctimas de explotación sexual en distintos locales de alterne de Sevilla, Málaga, Almería y Murcia.

La red estaba formada mayoritariamente por ciudadanos españoles, que captaban a mujeres para trabajar en sus clubes y, una vez que aceptaban, las amenazaban y sometían a condiciones humillantes.

Con la colaboración de las Inspecciones de Trabajo del Ministerio de Empleo y Seguridad Social de Sevilla, Málaga, Almería y Murcia, se realizaron controles en los clubes de alterne para la detección de posibles víctimas de trata de seres humanos, localizando en Málaga a una joven española, de origen dominicano, de tan sólo 15 años de edad, que ha sido liberada y puesta a disposición de las autoridades andaluzas de protección de menores.

La operación ha sido llevada a cabo por la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, las Unidades contra Redes de Inmigración y Falsedades Documentales de Sevilla, Málaga, Almería y Murcia, el grupo Operativo de Intervenciones Técnicas de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana y otras unidades de las Jefaturas Superiores de Policía de Sevilla y Málaga, con la colaboración de las Inspecciones de Trabajo de Sevilla, Málaga, Almería y Murcia.

Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual puesto en marcha en abril de 2013, que motivó la activación de la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos.