La Mesa del Ferrocarril nace coja

La otra ausencia clave fue la empresarial. Fuentes de Comisiones Obreras aseveraron que habían cursado la misma invitación que al resto de colectivos a los líderes de la Cámara de Comercio de Almería y a la patronal, a la Confederación de Empresarios de la Provincia de Almería (Asempal). No ocuparon sus sillas ni siquiera segundas espadas de estas organizaciones. Ambos colectivos remitieron sin embargo horas más tarde sendos comunicados en los que, lejos de excusar su falta -fuentes de la Cámara lo vincularon al hecho de que ya exista la Mesa de las Infraestructuras, un órgano que lleva dos años sin reunirse- sí que mostraron tácita y explícitamente su apoyo a las reivindicaciones infraestructurales de una Mesa de la cual, de facto, se han autoexcluido por el momento.

«Asempal ha mostrado su satisfacción por la intensificación de la concienciación ciudadana ante los graves perjuicios que soporta Almería en materia de infraestructuras ferroviarias», remitió la patronal. «Una preocupación que Asempal comparte y ha venido reivindicando en múltiples ocasiones, tanto por las vergonzosas y deficientes comunicaciones actuales en ferrocarril, como por los retrasos, la angustiosa lentitud de los proyectos y la falta de una política decidida de inversiones en el AVE Almería-Murcia-Corredor Mediterráneo».

La Cámara de Comercio, en un comunicado emitido en los mismos términos, aseveró que «continúa con su compromiso de pelear por la consecución de una vez por todas, de unas comunicaciones e infraestructuras que sitúen a Almería en el mapa y la hagan más competitiva y moderna».

Manifiesto

Sin embargo, y pese a los escaños ausentes, la Mesa dio ayer el pistoletazo de salida con una nutrida representación social. Aparte de los dos principales sindicatos de clase (UGT y CCOO) y de organizaciones agrarias como COAG, tomaron parte de la reunión los grupos municipales del Ayuntamiento de Almería (con la excepción de Izquierda Unida), asociaciones y colectivos vecinales, organizaciones de consumidores, Asafal y Califal (Amigos del Ferrocarril y plataforma contra el abandono de las líneas ferroviarias almerienses), Junta de Andalucía y Consorcio de Transportes. Además, de la reunión tomaron parte tanto el Ayuntamiento de Almería como la Diputación Provincial, ambas gobernadas por el PP. «Allí se han mostrado comprensivos. Han dicho que sí, que obviamente Almería ha estado olvidada, y que apoyan la reivindicación», indicaron varios asistentes al encuentro.

La primera de las reuniones centró su debate sobre el proceso organizativo y los primeros pasos a dar por la plataforma. Sobre la mesa se pusieron dos documentos de exigencias con la finalidad de redactar un manifiesto único a signar por todos. Estos documentos fueron los de CCOO y Asafal. Ambos habían sido dados a conocer públicamente en las últimas semanas y pasan por una actuación decidida -y no excesivamente cara- en la red convencional de ferrocarril entre Almería y Granada para mejorar las condiciones de explotación actuales. Cabe recordar que el viaje entre Almería y Granada, de dos horas y veinte minutos en el mejor de los casos, cuenta con limitaciones de velocidad constantes debido al mal estado de la decimonónica vía y ni siquiera tiene electrificación en todo su trazado. Además, también imponen al Gobierno que retome la inversión en la Línea de Alta Velocidad entre Murcia y Almería, paralizada hace tres años, cuando se acabaron los trabajos en los cuatro tramos en obras contratados por el anterior Ejecutivo.

Hubo 'entente cordiale' y, en los próximos días, una extracción de los colectivos sociales presentes se encargará de redactar un manifiesto único que se someterá al cuestionamiento de la Mesa del Ferrocarril en una fecha muy próxima. Concretamente, la semana que viene, el viernes 18 de septiembre. Si hay acuerdo definitivo, ese manifiesto será el fundacional con el que la Plataforma acudirá a Fomento a exigir que de las palabras «prioridad» o «intención» se pase a las de «licitación» y «obras». La predisposición inicial -salvo por las ausencias- parece revelar buenos augurios. Días antes, el miércoles 16, a las 19 horas, en la sede de Cajamar de la plaza Barcelona, se habrá reunido Califal en una asamblea fundacional que, de forma unipersonal -no en base a organizaciones sociales- pretende generar un conglomerado social que igualmente presione por mejoras en el ámbito del ferrocarril en Almería.

Los nuevos movimientos sociales en favor del ferrocarril en Almería surgen después de cuatro años en los que los recortes presupuestarios en materia ferroviaria han significado para Almería el parón de las obras del AVE y un idéntico panorama en cuanto a la mejora de la red convencional en servicio. Cabe recordar que Almería es de las provincías que tienen una mayor duración de viaje a su capital autonómica y a la estatal debido al estado de la red de trenes. Además, en las últimas semanas se han ido sucediendo averías y retrasos en los servicios ferroviarios existentes que han llegado a incrementar en más de cuatro horas las casi siete que ya dura el trayecto con la capital española, además del inconveniente de que las obras del AVE a Granada obligan a los almerienses a efectuar dos transbordos para llegar hasta Sevilla en el Media Distancia.