Rubi: «No soy supersticioso, pero estoy deseando que acabe el mes de enero»

Pero lo que poco se podía pensar, cuando se ganó al Real Zaragoza, por parte de la UD Almería, es todo lo que ha pasado en este primer mes de 2022 (incluyendo también los últimos días de 2021). Un cúmulo de circunstancias que han llevado al equipo entrenado por Rubi a que dejara a un lado todo lo bueno que le ha hecho ser el mejor de la primera parte de la Liga SmartBank y lo han convertido, resultados en mano, en un equipo al que le cuesta marcar goles y, además, ha recibido tantos en contra que lo dejan ya sin ser el que menos recibe de todos los conjuntos de la categoría. Un hecho que ha llevado a que se piense 'de todo' para haber llegado a esta situación.

Ni los profesionales la han encontrado. Como ayer mismo reconoció Rubi. El entrenador del Almería, repasando mentalmente todos los partidos disputados y, sobre todo, viendo todas dificultades que se le han presentado en apenas un mes, entendía que su equipo se había merecido más puntos que el único logrado. Que ha sido difícil afrontar cada partido disputado por los condicionantes, los que han dado la sensación de poner todo todavía mucho más complicado. Por ello, a alguien tan ecuánime en sus comentarios y basando todo en el trabajo, le salió asegurar, casi en una desesperación en voz alta, que «no soy supersticioso, pero estoy deseando ya que acabe el mes de enero porque nos ha venido una tras otra».

Enumerarlas sería hacer una gran lista. Centradas, principalmente, en los jugadores que pueden actuar en la punta del ataque. Con el regreso ya de Sadiq, de la Copa de África, lo que debe 'paliar' la falta de puntería de los rojiblancos en este primer mes del año. Para poder mejorar el porcentaje de acierto que han tenido sus compañeros en este tiempo. Un hecho que le hace ver a Rubi no todo tan oscuro, como sí puede parecer por los resultados conseguidos: «En estos cuatro partidos, hemos rematado a puerta más de 20 ocasiones, para hacer solamente dos goles», dijo. La parte negativa, «que los jugadores que sí han tenido acierto en la primera vuelta, en este mes de enero no la han tenido». La parte positiva, «que sin haber desplegado nuestro mejor fútbol, hemos creado ocasiones de gol en todos los encuentros. Incluso, ante el Eibar tuvimos más que en otros, en la primera vuelta, que ganamos».

El choque del pasado lunes, en el que los almerienses perdieron el liderato ante su 'verdugo', fue, para Rubi, un ejemplo de todo lo dicho. De comprobar que el Almería está manteniendo las ideas futbolísticas y recuperando el nivel físico de la primera vuelta, el que se ha visto muy perjudicado por los casos de covid y algunas lesiones entre varios componentes del plantel rojiblanco. «Recuperamos el balón muy rápido y, además, lo hicimos arriba», aunque la falta de acierto ante el marco contrario impidió que ese trabajo se reflejara en el marcador. «Hacemos muchas cosas bien, pero nos falta dar un pequeño giro de tuerca y volver al camino que llevábamos», señaló.

Aunque enero tiene todavía una nueva cita preparada para la UDA. La de mañana (21.00 horas) en el Nuevo Carlos Tartiere de Oviedo. En un encuentro en el que se medirán a un equipo que llega de encajar un rotundo 4-0 ante el Tenerife. Un varapalo que impidió a los del Principado acercarse a los puestos de playoff de ascenso. Para el Almería, poder acabar el mes con un triunfo supondría romper la mala racha de resultados y acabar estos 31 días en puestos de ascenso directo a la Liga Santander.

Para que cambie la dinámica, además de todo lo dicho ante el marco contrario, también debe el Almería recuperar «nuestra solidez defensiva». Rubi no tuvo reparos, en sus últimas comparecencias, en señalar a «algunos errores individuales» el haber encajado goles, como el primero frente al Eibar. Para no repetirlos ante un Real Oviedo que considera les pondrá «en problemas».

Sobre el rival, elogios. Muy estudiado y teniendo claro que la goleada encajada el pasado viernes en tierras insulares, no fue más que «un accidente». Prefiere pensar en la mayor dificultad, como el Oviedo suele conseguir cuando actúa como local. «Vamos a un escenario que no es fácil, más bien todo lo contrario. Va a ser un partido muy complicado ante un rival muy bien trabajado, que tácticamente es muy ordenado y que en defensa es sólido. El Oviedo es muy difícil de superar».

Fue de lo poco que se le preguntó y, por tanto, habló del rival. Porque en las actuales circunstancias del Almería, lo principal era saber el estado actual de la plantilla rojiblanca. «Los jugadores están con muchas ganas de conseguir ya una victoria, que se va a producir más temprano que tarde, y en el momento que la logremos vendrán muchas más». Ya con la presencia de Sadiq y pudiendo jugar cada uno en su sitio.