Empate en el Ramón de Carranza

Un equipo, el de Lucas Alcaraz, que suma ya cuatro derrotas seguidas. Que han sido un tanto mitigadas porque los perseguidores no han sacado el rédito posible en este tiempo para haber metido el miedo en el cuerpo a los seguidores almerienses. Pero que saben, tanto en el entorno como en el propio vestuario, que si esta noche se suma la quinta sería una marcha atrás en las aspiraciones. Porque el Córdoba-Lorca y el Barça B-Cultural pueden hacer que todo se comprima mucho más por la zona baja. Antes de eso, el Almería jugará.

Y lo hará con cambios en su equipo inicial. Por bajo rendimiento de algunos que han estado saliendo en la foto en las últimas semanas y, en otros casos, porque son bajas obligatorias por sanción (Pozo) y lesión. A las consabidas de Mandi y Fran Rodríguez, que no estarán hasta el próximo ejercicio, se han venido 'uniendo' Owona y Joaquín. Para este choque el 'nuevo' es Sulayman Marreh. El mediocentro africano estará apartado de los rectángulos de juego durante el próximo mes. Si su evolución es positiva, se perdería las citas de Cádiz, Albacete, Zaragoza y Barcelona B. Regresaría para viajar a Tenerife. Pero para eso queda, todavía, mucho tiempo y pueden pasar muchas cosas.

Esto hará que, en el día de hoy, Lucas Alcaraz tenga que poner un centro del campo nuevo. Rubén Alcaraz es el único fijo de los que han venido jugando. Junto al barcelonés, debería estar Verza. La otra opción es Callejón. La experiencia del oriolano o la juventud del almeriense. Podrían, incluso, jugar los tres. Porque, al no estar Pozo, el preparador puede poner un 'trivote' o elegir un nuevo mediapunta. Si opta por la segunda opción, un extremo deberá dejar la banda. Eso o que Hicham ocupe su puesto natural en la pizarra por detrás del '9'.

Y aquí también habrá modificación. En su caso, por decisión técnica. Porque tras darle todas las oportunidades desde que llegó, marcando solamente en Huesca, Lucas tomó ayer la decisión de dejar en Almería a Edoardo Soleri. En principio, Pablo Caballero podría ser el titular. Aunque si plantea un encuentro en busca de velocidad, Hicham tendría sus opciones como jugador más adelantado. Como tercera opción, un Juan Muñoz que retorna a la convocatoria, pero que sería como 'rizar el rizo' que se intercambiaran el quedarse fuera de la convocatoria o ser titular el sevillano y el italiano, quedando para el banquillo, en ambos casos, el argentino y el cartagenero.

Como también ha entrado en la lista para Cádiz Fidel. El onubense ha perdido su sitio en el equipo titular. También, en muchas ocasiones, hasta en el banquillo. Su rendimiento no está, ni por asomo, cercano al que sus prestaciones en cuanto a calidad y su contrato así marcan. Cuando se dice que los jugadores no están rindiendo a un nivel que sí han mostrado en otras campañas, el zurdo es el más claro ejemplo de esta aseveración dicha hasta por los entrenadores.

Ahora, cuando faltan nueve jornadas, contando la que empieza hoy, para el final de la temporada regular, Tino Costa pide que todos den la cara y aporten «desde dentro o desde fuera». Momento para comenzar a ver, en el caso del Almería, si todos son conscientes de lo que supone un descenso. El argentino denunció que no veía a todos en el vestuario sabiendo lo que realmente significaba perder la categoría. Se entra en la recta final y, si sigue con esa sensación, bueno sería que tuviera que cambiar. Porque, de no hacerlo, el camino hasta la cita 42 puede ser muy largo y tortuoso para el Almería.

En el último mes, los 37 puntos que figuran en el casillero de la UDA no han aumentado. El motor del coche se ha parado. Falta arrancarlo e ir poniendo marchas. Para poder acelerar y que los demás no recorten la distancia de seguridad que sigue habiendo. El 'mal de muchos...' no tiene mucho más margen al que agarrarse. En el Ramón de Carranza se verá a un Almería 'cambiado'. Por obligación y por querer encontrar el mejor camino. Otro tropiezo podría suponer que, por ejemplo, el Córdoba pudiera depender de sí mismo tras el domingo. Un paso atrás para la UDA. En su mano está que la quinta sea en positivo.