¿Se puede imaginar un ascenso del Almería de otra manera?

El partido se desarrolló con los nervios que surgen cuando hay tanto en juego. Cuando eso pasa, sucede que se cometen fallos porque tiemblan las piernas y se nubla vista. Un error de Alejandro Pozo lo aprovechó Javi Hernández para filtrar el balón y Borja Garcés poner a la UDA contra la pared. Rodrigo Ely, don Rodrigo, entabló a los pocos minutos, pero el Almería no estaba fino y, a la salida de un córner mal defendido, Omeruo hizo temblar al Almería. De salida en la segunda parte, Ramazani se fue hacia el centro y Sadiq hizo de mago, patilargo, embelesó a los defensores con sus pies y se sacó un zapatazo, asociándose con Robertone, para tener el partido a un gol de ascenso. A partir de ahí, el Leganés no dejó espacios. El Almería mereció marcar, pero no encontró la portería y se encomendó a la suerte divina. En Valladolid, el Pucela ganaba con solidez al Huesca y solo quedaba un milagro. Las vueltas que da la vida. Gio Zarfino y Fran Fernández, que salieron como villanos, son parte de la heroicidad que tiene el fútbol. De villanos a héroes, Almería debe proponer al que fue su técnico para santo.

El Leganés trató de esperar para salir a la contra. De inicio, no tuvo opciones de hacerlo, la primera vez en la que Borja Garcés se quedó solo ante Fernando lo hizo en fuera de juego. La banda izquierda y la sociedad entre Ramazani y Portillo acabó con pase del belga para Robertone cuyo disparo se fue a córner, en el minuto 4. En la salida, el remate de Rodrigo Ely se envenenó y forzó otro saque de esquina.

Con el Almería volcado, una acción por la izquierda de Javi Hernández, que le ganó la posesión a Alejandro Pozo, acabó con balón filtrado para el remate de Borja Garcés que superó a Fernando en la estirada y puso el partido cuesta arriba para los rojiblancos.

Estos reaccionaron para meterse en el partido con dos acciones consecutivas, la primera, en el 11, con la firma de Sadiq Umar, tras un buen pase de Portillo, pero la acción del nigeriano la salvó en la portería Asier Riesgo. En el 12, el remate fue de Largie Ramazani, tras pase de Robertone.

El equipo indálico no dejó de insistir. En el 14, un córner forzado por Javi Eraso fue la antesala del gol. El balón lo mandó Robertone al segundo palo para el remate de Rodrigo Ely rechazado por la defensa, pero sin contundencia. El balón le cayó de nuevo al italo-brasileño para meterla en la 'jaula' y poner las tablas.

No las tuvo todas consigo el equipo de Rubi porque el Leganés no hizo concesiones, peleó por estar en el partido y lo hizo con velocidad y jugando a la contra. Borja Garcés, en el 17, mandó el balón fuera y, en el 18, el que lo hizo fue Javi Eraso que lo buscó con un disparo cruzado que se marchó por encima de la portería defendida por Fernando, que vio una acción similar, en el 23, en una acción fabricada con Rober Ibáñez adelantándose a la defensa y filtrando el balón para el remate de Borja Garcés que se marchó fuera.

Esas llegadas, y sobre todo la falta de acierto en defensa, hizo que Babic quedara marcado desde el 24 por una amarilla. La lesión de Rober Ibáñez la suplió Nafti dando entrada a un José Arnáiz que aprovechó, en el 34, un gran pase de Juan Muñoz para mandar el balón al larguero de la meta de un equipo rojiblanco que no encontró el pase arriba y sí propició que el Leganés encontrara espacios por lo que hacer daño. El Almería sufrió en esa fase, a merced del Leganés, dueño del centro del campo y obligando a los indálicos a perseguir sombras. En un disparo de Juan Muñoz, Pozo forzó el saque de esquina. Lo botó el ex de la UDA y Omeruo, de cabeza, puso de nuevo al conjunto pepinero con ventaja, ganándole en la pelea a Samú Costa y Rodrigo Ely para dejar cerrada la primera parte.

En fase de nervios porque el Valladolid había marcado y dejaba a la UDA fuera del ascenso directo, Sadiq Umar se sacó una de las suyas. Se salió del área para buscar el balón y echarse al equipo a la espada, se apoyó en Lucas Robertone para poner el balón en el fondo de las mallas pepineras, en el minuto 52.

El Leganés, que se refrescó, empezó a empujar con la entrada al campo de Quintillà, Yoel Bárcenas y Bautista y este, en el 62, estuvo a punto de poner el tercero. La parada de Fernando, tras el error de Rodrigo Ely, evitó que el Leganés se pusiera por delante en el marcador.

Rubi buscó aires nuevos con la entrada de Dyego Sousa y Arnau Puigmal en lugar de Largie Ramazani y Francisco Portillo, tratando de tener más balón. Con Iñigo Eguaras en lugar de Lucas Robertone, buscó más creación. El navarro, en el 78, buscó portería, pero el balón se fue por encima del larguero, casi con las opciones de ascender. En el 85, pudo firmar el gol del 2-3, tras un gran servicio de Alejandro Pozo que Asier Riesgo mandó a saque de esquina. El Almería mereció ganar el partido, pero el gol que le debía dar el salto definitivo no llegaba. La desesperación empujó al lamento, pero lo que el Alcorcón le quitó la semana pasada sirvió para ponerle más épica al triunfo. El equipo de Fran Fernández hizo también los deberes, compitió para despedirse de la mejor forma posible, dejando al Eibar sin premio y dándoselo al que era, es y seguirá siendo su equipo eternamente.