Pozo avisa de que al Almería se «lo van a poner muy difícil»

Su carácter refleja el de una plantilla que responde a lo que tal vez sea el motivo del rendimiento. «Se le ve al equipo más feliz, más contento. Es lo que se ha visto en el día a día. Toda la temporada este equipo, como hemos dicho varios, es una familia dentro del vestuario y estamos siempre de risas, de cachondeo y eso es muy importante para un grupo y más para lo que viene ahora, estos cinco partidos que cuando se ponga el partido feo, que alguno se va a poner seguro, esa familia tiene que salir a darlo todo y entre todos vamos a sacar esto adelante y ojalá conseguir ese ascenso».

De momento, lo primero es el partido en Burgos. Su comportamiento en El Plantío habla de un equipo muy sólido. «El Burgos ha perdido poco en casa. Casi todos los puntos que ha hecho durante la temporada han sido en casa. Es un equipo muy fuerte, salvado la jornada pasada y ahora, salvado que es lo que querían, va a disfrutar del fútbol. Nos lo van a poner muy difícil, pero nosotros vamos a ir a darlo todo porque nos estamos jugando lo que nos estamos jugando. Nosotros vamos a ganar allí», dijo con seguridad.

El problema es que, por conocimiento, sabe que el cuadro burgalés actuará liberado tras conseguir el objetivo. «Normalmente, cuando ya se cumple el objetivo, se suelen soltar los jugadores. Cuando uno se suelta está más liberado y está mejor. Me ha pasado a mí en años anteriores con el Sevilla Atlético. Ojalá que no se suelten y podamos a ir allí a hacer nuestro juego. Va a ser un partido muy duro y ojalá se vengan para Almería los tres puntos».

De todas formas, la victoria no servirá nada más que para seguir en la pelea. Para él, en El Plantío no está el ascenso. «No. Es que Segunda es muy jodida y puede pasar de todo. Yo no creo que si ganamos allí hayamos ascendido. Creo que tenemos que hacer nuestro trabajo. Es verdad que hay un partido entre Eibar y Valladolid que se van a quitar puntos entre ellos. Lo que tenemos que hacer es ganar este sábado, depender de nosotros mismos, a ver qué hacen los rivales, ver el Eibar-Valladolid, también jugaremos en casa y antes, ojalá consigamos los tres puntos y verlo tranquilos en casa. Lo importante es sacarle puntos al tercero y poder ascender».

El caso es que, cara al espectador neutral, llega la mejor etapa de la competición. «Sí. Llega la parte más importante de la temporada. Últimos cinco partidos. Es verdad que estamos ahí en ascenso directo con dos equipos más que parece que no fallamos. Y la verdad que va a estar muy bonita la lucha hasta el final».

Y es que nadie de los tres de arriba da su brazo a torcer. «Estamos los tres que no fallamos y cuando falla uno da la casualidad también que fallan los otros y todos los equipos que nos quedan son todos difíciles y vamos a intentar ganar lo máximo posible y ojalá podamos conseguir el ascenso lo antes posible y no tener que estar las penúltima y última jornada luchándolo».

Ganar al Sporting y el modo de hacerlo ha dado alas a los indálicos. «Es verdad que ningún equipo nos lo ha puesto fácil esta temporada. Al final tuvimos una mala racha en enero que nos costó un poco la posición, pero la Segunda es muy jodida y el equipo se ha repuesto a esa mala racha y hemos llegado a las últimas cinco jornadas en ascenso directo y dependiendo de nosotros mismos. Ojalá lo consigamos lo antes posible y darnos esa alegría y dársela a la afición».

Eso solo pasa cuando el aspecto mental está sólido. «Este equipo tiene una fuerza mental espectacular. Todos estamos ahora empujando, tanto los que juegan como los que no. Ya se vio cuando metimos en el 90 cómo fuimos todos a celebrarlo. Es algo muy bonito y, después de haber metido un gol en el 70, que nos lo anulan, siempre te da ese bajón y ya no sueles llegar mucho a portería, pero el equipo siguió intentándolo y encontró el premio en el 90, ojalá en otros partidos lo consigamos antes, pero también es bonito meter en el 90 el gol de la victoria».

Y es que un gol en el 90... «Cuando metes un gol en el 90, creo que incluso a los que están lesionados se les quita la lesión. Es algo que te sale solo y puede haber de todo, pero es ir con todo a la mezcla de emociones que hay y nadie se da cuenta».

El gol de la victoria tiene un apartado especial, puede que incluso a lo largo de la temporada. Cuando le llegó el balón a Curro de Appiah, todos empujaron. «Fue un gol muy importante, pero es mucho más que eso. Yo conozco a Curro desde el Sevilla, que estuve con él muchos años. Sé que es un currante. Este año no está disfrutando los minutos que él querría, pero fue más especial porque fue el gol de él. Es un jugador importante en el vestuario, se hace de notar ahí dentro y creo que se vio cuando terminó el partido que fuimos la mayoría, creo que todo el equipo, en vez de celebrar la victoria nos fuimos para él a abrazarlo. Eso es lo que hace un grupo y se ve que es un jugador muy importante».

La aportación del onubense refleja lo que aportan los que entran. «Tenemos esa virtud de que los que salen del banquillo casi siempre lo hacen muy bien, el equipo llega a los últimos minutos bien, tanto con los jugadores que entran como con los que están en el campo, más fuerte que el rival. Con todo el partido intentándolo el equipo contrario pega el bajón. Se está viendo que estamos metiendo mucho en los últimos minutos y necesitábamos de todos. Menos esas tres lesiones que es mala suerte de Juanjo –Nieto–, Chumi e Iván –Martos–, ojalá y los más pronto posible estén con nosotros, pero los demás parece que estamos recuperados, Chumi está ya corriendo y ojalá esté pronto con nosotros. Para estos cinco partidos vamos a necesitar de todos».

¿Qué fue antes, el huevo o la gallina? Su rendimiento tiene, evidentemente, el premio de la confianza de Rubi, pero de no haber rendido como lo hace seguramente no estaría en el campo. «El míster me ha dado mucha confianza, yo intento darlo todo en el campo. Es importante ayudar siempre a los compañeros y muy contento de ser el jugador con más minutos y ojalá que de aquí a final de temporada siga siendo así y ayudar al Almería ascender a Primera División».

Además, no concede, pese a ser un defensa sin amonestaciones, solo la que vio frente al Girona. «No suelo meter muchas patadas. La amarilla fue para cortar una contra. He sido extremo toda la vida y con la rapidez que tengo suelo cortar las jugadas muchas veces con la misma rapidez. Es importante siempre tener eso y ojalá que no nos saquen muchas amarillas. Solo si hay que cortar una contra para que no se vaya, pero mientras menos partidos me pierda y más juegue mejor».

Es el modo para alcanzar la gloria del ascenso para una afición que reaccionó justo cuando su pareja cantó a capela el himno de la UDA. Ese día fue como encender la mecha y cada jornada se escucha ese cántico. «La afición para nosotros juega un papel fundamental de cara a lo que viene de aquí a final. El partido pasado, un lunes a las nueve de la noche y ha sido la segunda mejor entrada de la temporada, es algo espectacular. Vemos que la gente se está volcando con nosotros, nosotros intentamos darle lo que quiere. El otro día el gol llegó tarde, pero todo el mundo se fue feliz a casa y es un papel fundamental en esto que queda, sobre todo los dos partidos que tenemos en casa».

El técnico sevillano promete premios porque quienes asistan «van a disfrutar de un equipo que se está jugando lo que se está jugando. Y fuera han estado también viniendo todos los que han podido».