Un triunfo de los de verdad
La UD rompió su crisis con una victoria muy seria y contundente ante el Córdoba
Juanjo aguilera
Domingo, 6 de noviembre 2016, 00:33
Con el déficit que emana de la escasísima capacidad para sumar puntos fuera -solamente dos sumados en seis partidos-, a la UD Almería no le ... queda otra forma de salir de esa crisis que a base de victorias, aunque sean en casa, donde tampoco son para 'tirar cohetes' los resultados obtenidos hasta ahora, pues, aunque sólo el Tenerife fue capaz de llevarse los tres puntos, los triunfos tan necesarios son escasos -sólo dos en seis partidos-. Es cierto que suma tres empates más, pero ante la casi nula efectividad fuera el Estadio de los Juegos Mediterráneos tiene que añadir el 'apellido' de fortín, tiene que ser un lugar del que sea imposible sacar hasta un empate. Que quienes tienen que pasar por él sepan que en Almería no va a ganar nadie más y sería bueno ni tan siquiera empatar, pero con ganar unos cuantos partidos cualquiera se daría por satisfecho.
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En esto del fútbol, Cobertain se dio de bruces con el problema que suponen los descensos o la no consecución de objetivos. Aquello de que 'lo importante es participar' que se lo cuenten a los cerca de ocho mil aficionados rojiblancos que acuden cada dos fines de semana a ver a la UD Almería o cualquier seguidor que va a ver a su equipo, por pequeño de sea. Hipocresías, las mínimas. El Almería, ante tal bagaje conjunto -entre las conquistas en casa y las cosechas fuera-, no debe dejar pasar el tiempo porque, ya se sabe, los malos resultados se enquistan y se convierten en la 'comidilla' de quienes tiran por tierra la filosofía del que fuese el fundador de los Juegos Olímpicos de la era moderna.
Sin paños calientes
El pasado sábado, en La Romareda, la UD Almería volvió a su hábitat de 'regularidad' cuando juega lejos del Estadio de los Juegos Mediterráneos. En casa casi siempre se ha comportado como un equipo propio de quien, sin paños calientes, tiene que empezar desde abajo para conseguir su propósito. El propio Fernando Soriano dijo en su 'toma de posesión', tras la aventura de cuatro partidos de la pasada temporada, que el primer objetivo era el de llegar a los 50 puntos y, visto lo visto, no debe haber ni un descuido en buscar otra cosa que no sea esa. La plantilla no da para fijarse en otra meta que no sea la de la permanencia, al menos de momento y quien piense en otra cosa se equivoca.
Esta UD Almería sigue agarrada con pinzas a la categoría, puede que por su incapacidad para salir del 'bucle' en el que se encuentra, como si estuviese atrapado en el tiempo, de ahí que la victoria hoy puede ser el antídoto, porque, como se suele decir, no hay mal que cien años dure y, aunque se dice aquello de que ni cuerpo que lo resista, la escasez de luz no puede ser eterna. La demostración de lo casual del trance, como el movimiento, se demuestra andando, en este caso con victorias.
Las bajas
Pese a que Fernando Soriano habló el pasado viernes de que confía en todos los componentes de la plantilla para hablar de las bajas, la ausencia de Jorge Morcillo supone un hándicap porque desviste al equipo más aún en defensa, donde, como se ha podido ver, y pese a que son cuatro los partidos sin encajar gol, casi siempre ha andado por el 'filo de la navaja', concediendo mucho, más de lo debido. La ausencia del central valenciano, como queda dicho, trastoca planes, más por cómo se ha dado la semana, con el 'despoblamiento' de la banda derecha por las lesiones de Iago Díaz, Isidoro y Ximo Navarro, que ha sido el único que entró ayer en la lista de convocados, por lo que el experimento de pasar al granadino al centro de la defensa se 'desmorona' por las ausencias de Iago Díaz e Isidoro.
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Habrá cambios, puede que más sustanciales de los esperados porque es probable que se deshaga el centro del campo y ese doble pivote que han formado, siempre que las lesiones o las sanciones lo han permitido, Fran Vélez y Joaquín. Uno de los dos podría ser el central del que adolece el equipo, visto que Álex Quintanilla tiene la mala experiencia de su únicos 60 minutos en la categoría. Lo cierto es que el tarraconense se ha desenvuelto mejor en esa posición -llegó a ser uno de los hombres de Francisco en la última temporada en Primera División-, porque la experiencia de Joaquín se circunscribe a sus compromisos con el filial y la presencia del Córdoba con un Rodri que promete brega y pelea lo mismo requiere de alguien que sepa desenvolverse en ese 'barro' que promete el duelo con el sevillano nacido en Soria. Tampoco hay que olvidar los recursos de otros jugadores blanquiverdes. No es descartable que Duba aparezca por banda izquierda y Nano acompañe a Trujillo. De todas formas, esa 'falta' en el centro del campo por la presencia de Vélez como central podría permitir la entrada de José Ángel, que se lució el día de la segunda victoria, frente al Nàstic de Tarragona, o a Diamanka, siendo el senegalés en el que se centraron las miradas en los entrenamientos de la semana, con mucha incidencia en la presión, para superarla o para hacerla.
Está claro que de ahí hacia arriba hay jugadores con sitio, dos sobre todo, que son Antonio Puertas, al que el técnico maño se encargó de darle el brillo que el jugador benadujense merece, y un Quique que poco a poco ha ido cogiendo el camino perfecto para dirigirse a sensaciones del pasado año. Fidel, pese a que no tuvo una buena actuación en La Romareda, es otro fijo. Las dudas están en el enganche. Pozo, al que se ansía verle como en algunas de sus tardes de gloria como cuando saltó al campo frente al Levante, lleva dos partidos en los que su contribución al trabajo de equipo no ha sido el que debiera motivar su presencia en el once -sólo 'estuvo' en los primeros 45 minutos del partido frente al Nàstic-. Puede que esté en el once, pero tampoco sería descartable la aparición de un Iván Sánchez que, mudo, ha ido ganando sitio si alharacas ni promesas al viento. Su entrada podría hacer que Antonio Puertas pase a esa posición por detrás de Quique González y que el jiennense ocupe posición por la banda derecha.
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Enfrente
La conquista, si llega, será ante un rival que comenzó la temporada con mucha fuerza, que basa sus triunfos en un gran trabajo de bloque, que tiene armas destacadas para confirmar la posición que ostenta y que podría ser mejor de no ser porque los resultados no le han acompañado en los últimos partidos, en los que sólo ha perdido uno de los cinco, aunque tampoco haya ganado los otros cuatro. De todas formas, de esas igualadas tres llegaron a domicilio, donde sólo el Huesca, que es quinto con los mismos puntos, ha sido capaz de pintarle la cara.
Con las ausencias de los lesionados Deivid y Domingo Cisma, se presenta el Córdoba de José Luis Oltra, un equipo que suele hacer goles siempre -sólo en dos partidos no vio puerta- y que a domicilio suele conceder -en un único compromiso dejó su puerta imbatida-. Lo hace repitiendo convocados, lo que es duda es si jugarán los mismos.
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Parece que podría haber novedades en el once, aunque José Luis Otra anunciara que no va a cambiar su modelo, que parece no funcionar como se quisiera, por lo que se piensa en que Antoñito, que no aparece entre los titulares, podría ser una de las novedades, porque tras volver a lesionarse Domingo Cisma por problemas musculares, habrá que ver si Samu de los Reyes suma su cuarta titularidad o es su paisano ex del Albacete el que entra de inicio, aunque a banda cambiada.
De todas formas, los números del Córdoba deben ser motivo para soñar con no dejar para mañana lo que puedas, o debas, hacer hoy.
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