UD ALMERÍA

«Creo que, con otros resultados, Rivera se podría haber quedado»

El entrenador de porteros del Almería B, Ricardo Molina, también habló de Joan Carrillo: «Si todo sale bien, se dirá que el presidente acertó. Si por el contrario sale mal, se dirá que no se hicieron bien las cosas. Esto funciona así»

CÉSAR VARGAS

Martes, 20 de octubre 2015, 23:39

La tertulia del 'Minuto 92' de Radio Marca Almería, que se realizó en el restaurante Lamarca, situado en la céntrica Puerta de Purchena de la ... capital, tuvo como invitado a Ricardo Molina, entrenador de porteros del Almería B que se ha tenido que hacer cargo del filial, junto a Eduardo Frapolli, ante la ausencia de Miguel Rivera, sustituto de Sergi durante dos semanas al frente del primer equipo.

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El técnico, que estuvo acompañado por Víctor Hernández Bru, director del programa, y por los contertulios Javier Salvador, Sandra Gálvez y Manolo Soler, repasó en los micrófonos de Radio Marca estos días como primer entrenador del filial, la actuación de Miguel Rivera con el primer equipo y el flamante fichaje de Joan Carrillo.

Ricardo Molina afirmó que «al no existir la figura de segundo entrenador en el filial, nos tocó a Edu Frapolli y a mí hacernos cargo del equipo cuando Miguel Rivera subió a la primera plantilla. No fue una situación muy común, pero creo que se ha solventado bien».

El entrenador de porteros del Almería B comentó que «parecía que había posibilidades de que Miguel Rivera se hubiera quedado al mando del primer equipo de haber cosechado buenos resultados en estos partidos que ha disputado, por lo que imagino que estará tocado. Es un hombre al que las decisiones de club le afectan mucho, ya que se deja el alma en cada cosa que hace. Eso la afición lo sabe, y de ahí el cariño que le procesa».

No obstante, Molina aseguró que «Miguel Rivera es una persona muy optimista y seguro que mañana vuelve a venirse arriba. Él siempre se encarga de recordarnos en el vestuario que somos unos privilegiados por poder vivir de lo que nos gusta, que es el fútbol».

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El entrenador de porteros del Almería B también habló de Joan Carrillo, el que ya es nuevo técnico rojiblanco hasta final de la presente temporada. Molina admitió que «si todo sale bien, se dirá que el presidente acertó. Si por el contrario sale mal, se dirá que no se hicieron bien las cosas. Esto funciona así. En el fútbol, hacerlo bien no te asegura tener éxito, pero yo creo que la decisión de contratar a Joan Carrillo ha sido la adecuada».

La tertulia del 'Minuto 92' de Radio Marca tuvo tiempo, además, para comentar los desafortunados incidentes que protagonizó Fran Vélez con un aficionado rojiblanco al terminar el partido frente al Elche, en el que hubo algún encontronazo verbal. Ricardo Molina recalcó que «a favor de Fran Vélez hay que decir que, si un jugador actúa así, significa que no le dan igual las críticas ni la situación del equipo. Si sucediese al contrario, sí habría un problema serio. Las formas no fueron las adecuadas, pero yo en mi equipo quiero jugadores implicados».

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El ex portero incidió en que «en momentos así es muy difícil mantener la calma, porque vienes de cosechar un resultado negativo, de tener sentimiento de culpabilidad y, para colmo, te encuentras con eso. Es cierto que las formas no fueron las adecuadas, pero la templanza te la van dando los años».

No quiso señalar a nadie Ricardo Molina como culpable de esos fallos defensivos que viene acusando la UD Almería en cada partido de esta temporada. El entrenador de porteros defendió, precisamente, la figura del guardameta, y es que tanto Casto como Julián están muy discutidos en la portería rojiblanca.

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Molina subrayó que «cuando eres portero, todo se magnifica mucho más porque tus fallos suelen acabar en gol. Si el equipo no está en un estado de ánimo óptimo, los guardametas tampoco lo estarán, pero todo el mundo tiene que tener claro que los goles los encajan todos, al igual que la portería a cero la deja el equipo al completo, y no sólo el portero». El técnico incidió en que «es importante que se consiga acabar un partido sin encajar gol. Cada vez que un portero se va a su casa imbatido, su confianza crece. El Almería lleva tiempo sin lograrlo, y eso se nota en todo el equipo».

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