Djukic y Rubi, los mejor posicionados, pero no los únicos para dirigir al Almería

Djukic (Šabac, Serbia, 19-02-1966) ha estado anteriormente en Hércules, Valladolid, Valencia, Córdoba y Sporting de Gijón, su último equipo hasta el pasado julio. También estuvo al mando de la selección sub-21 de Serbia, Partizan de Belgrado, en dos etapas; selección absoluta de Serbia, RE Mouscron de Bélgica y Al Shabab Al Arabi Club.

De Djukic se dice que es técnico con carácter, que intenta ser cercano con los jugadores, aunque también es de los que mantiene las distancias y lleva el respeto a rajatabla, que unas veces le dio resultados, pero otras, como en Valencia, no fue la mejor manera.

Con el aspecto psicológico como uno de los elementos clave, se maneja con distintos sistemas. En Serbia utilizó el 1-4-4-2 y en Valladolid, donde lo hizo con un 1-4-2-3-1, ascendió a Primera y mantuvo al equipo en esa categoría. Sin embargo, con el paso de las temporadas ha ido adaptándose a los nuevos tiempos, en los que hay que acomodarse a las condiciones de las plantillas y la versatilidad que ofrecen los rivales, teniendo en cuenta las virtudes y las 'fisuras' para cerrar unas y aprovechar las otras.

Joan Francesc Ferrer 'Rubi' (Vilassar de Mar, Barcelona, 1-1-1970) llegaría tras un largo historial deportivo, con 245 partidos en Liga de Fútbol Profesional y en el paro desde junio de 2020, tras haber dirigido al Real Betis Balompié, su último proyecto. Antes, además de en Segunda B, donde estuvo en cuatro equipos diferentes y cinco campeonatos, dejó clara su apuesta diáfana por el fútbol protagonista, ofensivo y atractivo. «Prefiero que el Espanyol gane 3-2 que 1-0», dijo en su primera rueda de prensa con el equipo perico. Y aquella fue, tal vez, la mejor temporada que el barcelonés –avaladas sus formas por Pep Guardiola– ha firmado a lo largo de su carrera. De hecho, consiguió meter al Espanyol en la Europa League y, pese a tener un año más de contrato, prefirió salir para dirigir al conjunto verdiblanco.

En el Villamarín no llegó a cuajar su estilo, el 1-4-3-3 que es su esquema táctico habitual –el que ha sido utilizado en la UD Almería desde hace mucho–. Este consiste en una idea de juego bien definida, llevando la iniciativa del partido y tratando de jugar permanentemente en el campo rival. Lo utilizó en Girona y también en el Espanyol, donde obtuvo unos resultados espectaculares, aunque también con el equipo perico, con el paso de las jornadas, el nuevo preparador de la UD Almería ensayó el 1-5-3-2, con la utilización de laterales ofensivos, algo que tendrá en la UD Almería, sobre todo con Iván Balliu y Sergio Akieme, dos jugadores que se adaptan perfectamente a lo que hay en su libro de estilo.

Su carrera es larga, puesta en marcha en la LFP a los mandos de aquel Girona que complicó el ascenso a la UDA de Javi Gracia, en la temporada 2013/14. Rubi llegó a crear un engranaje perfecto con un estilo de juego valiente y atrevido tanto en Montilivi como cuando actuaba como visitante, con aplicación de conceptos futbolísticos que aprendió en las categorías inferiores del FC Barcelona como pueden ser el toque, la posesión y una pegada que, en la UDA, tendrá que recuperar a base de trabajo y confianza.