El 'diablo' viste el rojiblanco de la UD Almería

Decía Gianni Rivera, el primer italiano en conseguir el Balón de Oro, que «el fútbol es divertirse con la pelota» y seguramente Largie Ramazani es de ese tipo de jugador que le de la razón. El fútbol del belga es lo que es por lo que disfruta y hace disfrutar. «La verdad es que me gusta ser feliz dentro del campo porque jugar al fútbol es lo que amo y es lo que quiero hacer siempre», dijo ayer en UDA Radio. Contento por cómo van las cosas, no tiene duda que «tenemos que continuar y hacer todo lo posible para conseguir el ascenso, que es lo que realmente queremos».

Su rendimiento responde a la felicidad con la que juega. ««Sí. La verdad es que cada vez que tengo el balón en los pies siento esa felicidad, pero es que cómo no vas a sentirla cuando estás en el campo y los aficionados corean tu nombre, apoyan al equipo. Cómo no vas a ser feliz cuando marcas un gol. La verdad es que me gusta ser feliz dentro del campo porque jugar al fútbol es lo que amo y es lo que quiero hacer siempre».

El joven jugador que llegó procedente del Manchester United el verano de 2020, se define como una persona siempre feliz. «Si pasas un día conmigo lo que puedo ofrecer son risas, buenos momentos y sería un gran día», reconoció quien ha traído la felicidad a la afición rojiblanca porque su fútbol es de otra pasta.

Y es que al extremo rojiblanco se le echaba de menos desde la grada del Estadio de los Juegos Mediterráneos, desde que se lesionara en la segunda parte del encuentro disputado frente a la UD Las Palmas. «Como ya dije en anteriores entrevistas, tenía muchas ganas de jugar. Siempre quiero más y más y también los aficionados estuvieron espectaculares durante el partido y me dieron muchísimas fuerzas».

Por eso, por su presencia en el terreno de juego, llegó la séptima victoria de los rojiblancos ante el Real Valladolid, deparando la alegría propia de las victorias importantes. «La verdad es que estamos muy contentos en todo el equipo por esta buena racha, pero tenemos que continuar y hacer todo lo posible para conseguir el ascenso, que es lo que realmente queremos».

Pletórico, el extremo indálico invitó a los seguidores rojiblancos a no preocuparse por su estado de salud. «No os preocupéis. Siempre voy a estar preparado y en cuanto tenga el balón en el pie allí estaré», anunció, como también se excusó por la celebración. Había prometido hacer otra. «Es verdad que no he cumplido la promesa, pero era un gol superimportante, había vuelto de la lesión y los aficionados dicen que les encanta cada vez que hago un gol que dé esa voltereta y para este gol no podía fallarles».

Si los sigue haciendo se podrá mirar al ascenso, que no será fácil. «La verdad que sí, que es muy difícil, pero nosotros no tenemos que pensar en el ascenso, solo en ir partido a partido, conseguir una victoria cada partido y al final todo llegará».

Tampoco falla al equipo. Pese a sus 20 años, el rojiblanco mostró su capacidad de liderazgo en el equipo, como consecuencia de que no le pesa la responsabilidad. «No siento la presión. Siempre, para mí, jugar con libertad es lo más importante y para ello me ayuda muchísimo el equipo. Lo ha hecho para volver lo antes posible al terreno de juego y me ha ayudado también para poder dar mi mejor versión dentro del campo», reconoció.

La está dando para provocar, casi seguro, cierta infelicidad en el Manchester United, que decidió traspasarlo hace un par de temporadas. Este 'diablo' es ya un 'diablo' rojiblanco. «La verdad que estoy muy feliz de poder dar el cien por cien de lo que tengo a la UD Almería y sí es una pérdida para ellos», expresó en referencia al equipo de Old Trafford.