Darwin Núñez llegó al Almería con un pan debajo del brazo

Entre nervioso e ilusionado el delantero habló para los medios de comunicación que estaban en su despedida y mostró el talante de un jugador que, a sus 20 años, tenía muy claro su origen. «Por fin podré comprarle una casa a mis padres», dijo. Una máxima que ha tenido siempre, desde que su madre recogía botellas por la calle para poder venderlas, mientras que su padre trabajaba en la construcción. Incluso, como declaraba días antes del traspaso a la UDA, los progenitores se quedaban sin cenar alguna que otra noche para que él, junto a sus hermanos, pudieran hacerlo.

El importe primero a abonar por la UDA fue de 4 millones de euros. El Almería se hizo 'únicamente' con el 80% del pase total del jugador y el Peñarol, como cuando la posterior venta a Benfica, se quedó con el 20% restante ante una más que posible venta. Habría más sumas que aportar. La primera era de 750.000 euros si jugaba 20 partidos con el primer equipo rojiblanco, que los hizo. La otra cláusula, también por la misma cantidad, se sumaría si hubiese alcanzado los 40 partido, que no llegó a cumplirse. El charrúa, nada más llegar a la UDA, tuvo que ponerse al nivel de la competición.

Su debut se produjo en un aciago partido en El Molinón, donde la UDA perdió 4-2. Entró en lugar de Lucien Owona, lesionado antes del descanso. Sin embargo, los diez minutos finales que disputó en Alcorcón 'aportaron' más luz si cabe que los de su primera 'entrega' como rojiblanco. En Santo Domingo, en un partido que acabó en tablas (2-2), dio la imagen de ser un jugador diferente que empezaría a borrar 'de un plumazo' los comentarios de los 'teóricos' del fútbol que hablaban de su inexperiencia, de ser un jugador todavía 'muy verde'. Formó tándem sobre todo con Juan Muñoz, tirándose a banda. Y, tras un primer gol frente al Extremadura de penalti, comenzó a dar muestras de su capacidad por velocidad y colocación. En su año como rojiblanco, Darwin Núñez, que cumplirá 23 años el 26 de junio, puso la firma a 16 goles en los 32 partidos disputados, de los que estuvo de inicio en 30, además de participar como asistente en otros dos tantos.

Estaba cantando que su vinculación con la UDA, físicamente, sería efímera, no así con el club –ha estado viendo partidos de la UDA y pasa esporádicos días de vacaciones en la ciudad–. El Benfica pagó a la UDA 24 millones de euros, en lo que fue el fichaje más caro en la historia del club lisboeta. Con la camiseta del mítico equipo portugués, Núñez firmó en dos años 47 goles y 16 pases de gol en 84 partidos. En el último campeonato marcó 26 goles en 28 partidos. Además, en Champions marcó seis goles 'eligiendo' muy bien a sus 'damnificados' y todos muy parecidos, recordando los que ya firmó en la UDA, arrancando desde la izquierda en velocidad. Al Barça, en la fase de grupos, le hizo dos en un partido, luego marcó frente al Bayern de Munich, Ajax y, precisamente, al Liverpool al que le hizo un gol en Da Luz y otro en Anfield, en la eliminatoria de cuartos de final del máximo torneo continental, que no impidieron a los 'Reds' ganar aquella eliminatoria. Sin embargo, Jurgen Klopp, elogió su actuación.

Ayer, el SL Benfica, a través de sus redes sociales, anunció que el Liverpool había llegado a un acuerdo con el club lisboeta para hacerse con los servicios del delantero uruguayo Darwin Núñez por 75 millones de euros –79 millones de dólares, 64 millones de libras–. La transferencia podría eventualmente llegar a 100 millones de euros, según determinados resultados deportivos, lo que representaría el traspaso más caro en la historia de Liverpool. Además, la misma supone la llegada de diez millones de euros a la UD Almería, que se guardó, con la venta al Benfica, el 20% de la plusvalía de un posible traspaso, con una cláusula en el contrato que no superaría nunca esa decena de millones, que le vendrán de 'perlas' al equipo rojiblanco para su vuelta a Primera División.

Núñez está listo para firmar un contrato de seis años con el Liverpool, que esta temporada ha sido subcampeón de la Premier League y de la Champions League, y que estuvo en conversaciones con el Benfica durante varias semanas.

La operación de Darwin Núñez supone la venta más cara realizada por la UD Almería a lo largo de la historia, superando la de Felipe Melo a la Fiorentina, que se produjo por ocho millones de euros, que era la cláusula de rescisión que tenía el brasileño, que llegó a la entidad rojiblanca procedente del Racing de Santander por medio millón de euros. La de Darwin sigue dando réditos. Su venta pasó a ser la más cara cuando en la temporada 2020/21 se involucró con el Benfica.

Otras ventas 'caras' fueron la de Pablo Piatti al Valencia, que supuso por parte del conjunto che el desembolso de 7,5 millones de euros, aunque el Almería era poseedor del 75%, mientras el 25% restante pertenecía al Estudiantes de La Plata. También hubo desembolso de cinco millones de euros por la vuelta de Álvaro Negredo al Real Madrid, tras pagar la UDA tres millones por él. Luego, el equipo madridista lo vendió al Sevilla por 15 millones. Por último, Aleix Vidal se fue al Sevilla por 4 millones y cuando el Barça lo firmó un año después hubo 'premio' para la entidad rojiblanca, que se quedó con casi dos millones de euros por la citada operación.