El Bilal Touré celebra el gol frente al Atlético. Carlos Barba/Agencia Lof
UD Almería

El Bilal Touré confía en que en Almería lo mejor está por llegar

El maliense, que el domingo puso la firma a su primer gol de cabeza con la UD Almería, afirma que «marcar a un equipo como el Atlético es un sueño»

Miércoles, 18 de enero 2023, 23:48

Cuando llegó a la UD Almería lo hizo con una maleta cargada de ilusiones, pero también con mucho peso en ella. No en vano llegaba ... con, aparentemente, poco bagaje en grandes competiciones y encima lo hacía llevando el peso de la historia a su espalda por tener que ser el sustituto de Sadiq Umar, un delantero que marcó época en las dos temporadas en las que vistió como rojiblanco. El Bilal Touré, con pasaporte de Mali, pero nacido en la ciudad costamarfileña de Adjamé, un 3 de octubre de 2001 ha ido superando etapas. En Almería está en ese proceso. Por lo pronto ya ha igualado su mejor etapa en el Reims, en la Ligue 1 francesa, donde en la temporada 2020/21 hizo cuatro goles. El del Atlético el pasado domingo fue el cuarto con la UDA.

Publicidad

Si se comparan los momentos en los que el 'sustituto' de Sadiq pasa a ser el delantero titular de la UD Almería. El Bilal Touré sumó el domingo pasado su cuarto gol después de haber disputado 845 minutos, mientras el nigeriano hizo su cuarto gol tras haber jugado 980 minutos más. El primero lo hizo Sadiq con 20 minutos menos –200 minutos desde su debut por los 220 de El Bilal–. Las comparaciones son odiosas, pero ambos tienen cosas en común. Africanos los dos, tienen el objetivo de triunfar y ambos pisan firme en su propósito.

Finalizador

Aunque sus inicios no fueron jugando como delantero, lo cierto es que el tiempo ha ido dándole el lugar que buscaba. De pequeño en la cabeza «solamente fútbol y de pequeño nunca jugaba de delantero, incluso jugaba de defensa, de lateral, pero nunca había jugado de delantero». Entonces, su vida era la propia. «La verdad que como cualquier otro niño en África de una familia humilde que tiene el sueño de jugar a fútbol y al final he tenido la suerte de conseguirlo».

Su gol del domingo le pone donde por trabajo merece, pero tiene claro que quedan cosas por hacer y objetivos que cumplir. «Mi familia está muy contenta y solo me dicen que esto es el principio y que lo mejor está por llegar todavía», expuso ayer el delantero rojiblanco, en una entrevista enviada por los servicios de comunicación del club.

De los goles que ha marcado, el último ha sido el primero que como rojiblanco marca con la cabeza y seguro que tiene un sabor especial. «Todos los goles son bonitos, yo pienso que lo importante es tener la posesión y las ocasiones de gol y en el último partido, gracias a un centro de Robertone, conseguí hacer un gol de cabeza», además de que conlleva el equipo que lo encaja. «Por supuesto que se lo explicaré a los hijos y a los nietos. Marcar a un equipo como el Atlético de Madrid es un sueño».

Publicidad

Todos tienen su dificultad

Por ser ante el Atlético el gol tiene su mérito, pero también por ser, simplemente, un gol. El fútbol de hoy en día 'coarta' a los goleadores por la imposición de un fútbol más defensivo. «Ahora la verdad es que a nivel defensivo es muy complicado marcar un gol así, pero cuando tienes la ocasión, que a lo mejor te surge una vez, tienes que aprovecharla».

Lo cierto es que también los delanteros de ahora tienen pocas oportunidades si responden a lo que pasaba antaño con los llamados 'palomeros'. El pasado domingo recuperó dos balones en campo rival, ganó tres de los cuatro duelos por alto en los que intervino, solo falló dos de los 14 pases totales en fase ofensiva y provocó dos acciones de alto impacto ofensivo. Es un todo que le diferencia de épocas pasadas. «Yo pienso que los delanteros ahora han cambiado, que no es como hace varios años, y con las consignas del entrenador no puedes estar parado, hay que defender, ayudar al equipo y hacer todo lo posible para intentar ganar y ayudar al equipo».

Publicidad

Adaptación

Y también es época de adaptarse. Tiene 'feeling' con Gonzalo Melero, al que busca en el pase y que le busca para finalizar. Ahora, deberá entenderse con Luis Suárez, con el que compartió minutos en el partido ante la Real. «Yo pienso que podemos jugar los dos juntos, conmigo y con cualquiera. Va a depender de lo que pretenda nuestro entrenador».

El caso es que el tiempo dará la ración. Él apenas lo tuvo cuando llegó a la UDA, pidiéndosele pronto una reacción positiva, para lo que seguramente habrán valido los casi dos meses de parón por el Mundial. «Cuando llegué yo no sabía el tiempo en el que me iba a adaptar, pero sí que es verdad que no tenía mucho para pensar en ello. Tenía que ponerme las pilas y adaptarme cuanto antes».

Publicidad

Nacido de una familia humilde en África, ha llegado a la élite en España, tras pasar por Francia, tiene claro que es «un privilegiado, pero sí que es verdad que he tenido que trabajar mucho para conseguirlo y renunciar a muchas cosas para estar aquí hoy» y ser futbolista porque en África, a donde vuelve para visitar a su familia en Mali –nació en Costa de Marfil, creció allí y luego se fue a Mali–, las oportunidades eran pocas. No tuvo tiempo para pensar en qué hubiese sido en caso de no ser futbolista. «Nunca lo he pensado. No lo sé, pero sí que en África de pequeño iba a la escuela por si no salía lo del fútbol sí que lo hacía para tener una base».

Ahora el reto está en Valencia y en conseguir una victoria que alimente la permanencia, haciéndolo además fuera de casa. «Yo pienso que en la cabeza de todos los jugadores y del entrenador queremos dar el máximo sin tener en cuenta el nombre del equipo e intentar conseguir la victoria en Valencia», respondió en francés gracias a la traducción de Pedro Serrano, uno de los fisioterapeutas de la entidad indálica. Él advierte que «español hablo ya un poco. Solo digo a la afición eso de ¡Vamos Almería!». Sin embargo, promete hablarlo «el año próximo».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad