El Almería se encariña con la piedra

No lo hizo y, en la primera jugada que tuvo el Málaga, en una mala salida de balón, acabó golpeando al equipo rojiblanco, que se desvaneció fruto, tal vez, de la presión a la que se vio sometido. Temblaron las piernas y el equipo se deshizo. En otro error, una entrada por banda izquierda acabó con Selvi cometiendo un penalti que Antoñito transformó en el gol del empate.

Aunque el cuadro indálico lo siguió intentando, no fue capaz de tener la confianza precisa para ganar el partido. Aún así, en el 86, un penalti sobre Marc Pubill pudo darle el triunfo a los rojiblancos, pero Luis Suárez mandó al larguero la pena máxima y aireó el lamento.

Ansias, pero pacientes

Tuvo que sorprender Rubi e nuevo porque se 'cayó' finalmente Lucas Robertone, por lo que el vilarense tuvo que hacer cambios en la 'sala de máquinas' con Dion Lopy y Selvi Clua, pero es que además colocó a Alejandro Pozo por banda izquierda.  El partido fue intenso; así lo propusieron ambos equipos , con el Málaga intentando tener el balón;el Almería esperando en campo propio saliendo rápido, pero con el rival cortando el balón incluso en falta.

El cuadro malaguista presionaba la salida de balón rojiblanca. Eso dio pie a que llegara el peligro. En el 8, un balón a la espalda de Luis Suárez fue despejada a córner cuando Leo Baptistao, aprovechando que los centrales del Málaga estaban fijando a Luis Suárez, casi llegaba para quedarse solo ante Alfonso Herrero.

El brasileño 'avisaba' con tirar al espacio, pero faltaba conectar. En el 10, Dion Lopy se habilitó el espacio y vio el desmarque de Leo para ponerle un balón que el brasileño aprovechó, escorándose a la izquierda de Alfonso Herrero, para 'ejecutarle' con la pierna izquierda y poner al equipo indálico mandando en el marcador.

Con mando

El conjunto malaguista tenía más balón, pe< rojiblanca bien plantada, anticipándose siempre en defensa y gestionando bien el partido, impidiendo al Málaga las opciones de crecer. Además, los rojiblancos saltaban la presión del Málaga, que dejaba mucho espacio a sus espaldas. En el 26, otra acción de Lopy estuvo a punto de 'embocarla' Sergio Arribas, con un disparo que se marchó fuera por muy poco, en el 25, y dos minutos después el remate fue de Luis Suárez a centro de Pozo, pero el cabezazo se fue por encima del larguero de la meta malaguista.

El Málaga, valiente y temerario en cierto modo por su propuesta, no escatimó la posibilidad de estar en el partido. Así, en el 33, el remate e Kevin Medina estuvo a punto de sorprender a Luis Maximiano porque el balón se fue fuera por muy poco.

El Almería, con Luis Suárez bajando a recuperar balón, desniveló la posible igualdad que pudiera haber en el partido. El cafetero, en el 37, cabeceó fuera, tras una acción poderosa de Dion Lopy. El Almería buscaba tranquilidad y Marc Pubill, en el 39, remató al 'muñeco' a la salida de un córner que se quitó de encima Alfonso Herrero como pudo;Luis Suárez, no pudo rematar bien el rechace. Y, en el 41, fue Sergio Arribas el que lo intentó desde fuera del área, sin encontrar el destino apropiado.

Control

El Málaga no encontraba los espacios, le costaba llegar a zona de 3/4, con el Almería cerrando espacios y saliendo con decisión para evitar cualquier problema, que no los hubo y que propició que al descanso se llegara con ventaja rojiblanca.

De salida, Pellicer cambió hombres y posiciones. Entraron Baturina por Chupete y Antoñito Cordero por Kevin Medina. Además, los centrales malaguistas intercambiaron sus posiciones. El Málaga salió más metido arriba, jugando en campo contrario y empujando con opciones a balón parado. Dani Sánchez, en el 49, puso el balón al centro del área y Selvi Clua lo despejó a córner. El segundo pudo ser gol olímpico, pero Luis Maximiano mandó el balón fuera, de nuevo.

Todo igual

Reaccionó la UDA con llegadas por ambas bandas. En el 52, pudo marcar Arribas, pero el rechace lo condujo Álex Centelles, por la izquierda y se sacó un centro que el propio Sergio Arribas convirtió en el 2-0 para los rojiblancos.

Faltó contundencia en la primera llegada del Málaga al área rojiblanca, en el 54. Fue a la salida de córner que le cayó el balón a Alejandro Pozo para sacarlo, pero la pérdida le llegó a Dani Sánchez que se sacó un 'zapatazo' que aprovechó para poner el 2-1 en el marcador. Y si las cosas estaban mal se pusieron peor, en el 59, con un penalti de Selvi Clua que lo aprovechó Antoñito Cordero para poner las tablas en el marcador, con un partido nuevo.

El cuadro rojiblanco estaba 'fondeando', mientras el Málaga emergía y peleaba para encontrar los espacios, en un partido de ida y vuelta, con demasiada imprecisión en las entregas de los rojiblancos, que trataron de cambiar con la entrada al campo de Arnau Puigmal y Gonzalo Melero, en lugar de Alejandro Pozo y Selvi Clua.

Las prisas

Tal y como se había puesto el partido, al Almería le entraron las prisas, mientras el Málaga jugaba con tranquilidad, con la confianza en sus manos, que era lo que le faltaba al equipo rojiblanco, que se había ido del partido como consecuencia de los dos errores que acabaron permitiendo al Málaga empatar el partido.

El equipo blanquiazul presionaba la salida de balón indálica, con muchas dificultades para encontrar los espacios y sin profundidad en ataque. Salvo, en el 83, en el que el balón se fue a saque de esquina. En el 86, Marc Pubill fue derribado dentro del área, agarrado a la salida de un córner. Luis Suárez lo lanzó a la madera y el balón se marchó por encima de la portería de Alfonso Herrero, esfumándose la oportunidad de remontar el partido.