Jugadores en nómina o cedidos con los que cuenta la UDA. R. Márquez/J. J. A.

UD Almería

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El Almería tiene cerca de una treintena de jugadores en nómina para el curso próximo

El equipo indálico tiene 'haciéndose' fuera a siete jugadores y cuenta con cuatro que pueden irse a la conclusión de esta Liga

Juanjo Aguilera

Almería

Domingo, 4 de febrero 2024, 23:25

Vistos los derroteros por los que camina la UDAlmería, no queda otra que pensar en el año próximo y mirando 'fijamente' a una categoría diferente. ... La derrota del pasado sábado en Mestalla es otra piedra en la rueda indálica que cercena las escasísimas opciones de permanencia, que tampoco eran muchas antes, pero ahora agarrado tan sólo a las matemáticas. Las mismas dicen que aún quedan 45 puntos por jugarse y los rojiblancos, con 6 en el casillero, tendrían que sumar más de la mitad para no echar por tierra el trabajo realizado por el equipo la temporada del ascenso y el pasado curso, en el que logró una salvación 'épica' con peor plantilla que la actual.

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Sin pensar en la categoría, el equipo rojiblanco tiene que mirar lo que tiene y, en ese sentido, cuenta con una nómina que, para el curso próximo, la forman 19 jugadores de la primera plantilla; Marezi, que trabaja con el primer equipo pero con ficha del filial, y seis jugadores que están cedidos, además de Lázaro Vinicius que está muy cerca de recalar en el Palmeiras brasileño con una opción de compra, aspecto éste que también tienen algunos de los jugadores que se encuentran 'curtiéndose' en otros equipos en la actual temporada.

El estado

Lo cierto es que el conjunto indálico tiene tarea en los despachos. La temporada puede devaluar a algunos jugadores de la actual plantilla, pero el Almería está obligado a vender porque sus jugadores, como dijo Mohamed El Assy el pasado viernes, tienen mercado. Los nombres de Dion Lopy, sobre todo, pero también de Largie Ramazani, Lucas Robertone o Sergio Arribas –pichichi con seis tantos de un equipo sumamente débil en las áreas– son 'caramelos' que se abaratarán con el descenso.

El Almería del próximo año tiene que mirar hacia todas sus líneas, empezando por la portería. El único jugador con contrato para el curso próximo es Fernando Martínez –le queda un año más de contrato–, después de pasar una temporada casi en blanco, siendo titular, por ahora, durante dos partidos. Diego Mariño cumple contrato el próximo junio y la continuidad de Luis Maximiano concluye, si bien la opción de compra de la UDAlmería sobre el cancerbero portugués no tiene obligación de ejecutarse si hay descenso y es la dirección deportiva del club la que tiene 'la sartén por el mango'.

El punto débil

La defensa, de la que Gaizka Garitano dijo el sábado en Mestalla que casi que no tiene nivel de Primera División, no tiene a ningún jugador en la puerta de salida. Marc Pubill, que es titular fijo en buena forma, quizás sea lo único salvable de la línea defensiva. Llegado casi con la competición iniciada, ha tenido que pelear con los rivales y con una lesión que le ha impedido crecer todo lo que de él se esperaba. Pero las muestras de calidad le sitúan como un líder en la banda derecha –cumple contrato a la conclusión de la temporada 2028/29–, con Pozo por detrás, con dos años menos de contrato. Además, de Mendes, que se ha ido cedido al Mirandés.

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Édgar, al que se acude para tapar problemas –rinde mejor como mediocentro y con la llegada de Alexandar Radovanovic, con filiación hasta final de la próxima temporada, no es ni el tercer central–, tiene contrato hasta junio de 2028; a Chumi se le puede poner el 'cartel' del '3 en 1' porque ha jugado hasta de lateral diestro. Cumple contrato al término de la próxima, mientras César Montes, que fue el último recurso de club, en verano, para salvaguardar la debilitada posición por las salidas de Srdjan Babic y Rodrigo Ely, tiene contrato hasta 2028, tiempo suficiente para su revalorización, tras un rendimiento deficitario en lo que va de temporada.

Habrá que mirar hacia el flanco izquierdo. Ya con Akieme en el equipo, se hacía necesario la adquisición de un lateral porque con Centelles solo 'no basta'. Al valenciano le quedan dos años más de contrato para justificar su capacidad y una evolución que no da para muchas alegrías.

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Lopy y tres más o...

Tres y Lopy para el centro del campo. El rendimiento del senegalés le ha hecho dar un salto a la pasarela que hizo que el club rechazara una oferta para una incorporación inmediata al Friburgo alemán. Y su aportación a la UDA es de lo poco que se salva. Será un fijo, pero su salida también podría ser un alivio porque no es un jugador para Segunda. Eso sí, o se pasa por caja o tiene contrato hasta final de la temporada 2028/29. Su acompañante no le anda a la zaga porque su nombre ha sonado para otros equipos, sobre todo para una vuelta a Argentina. Lucas Robertone es un asistente 'nato' que ha crecido mucho desde su llegada. Tiene contrato hasta la conclusión del curso 2027/28.

Inicialmente apareció de forma continuada Iddrisu Baba. El ghanés, que llegó cedido pero que tiene prórroga de 'unión' con la UDA hasta la 2026/27, se ha encontrado con problemas de un sitio perdido y de su presencia en la Copa de África.

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Gonzalo Melero es de los más cercanos en finalizar su relación contractual en esa parcela de la sala de máquinas. El madrileño se ha visto lastrado por las lesiones para tener continuidad en el once inicial, tanto con Rubi, el curso pasado, como Vicente Moreno o Gaizka Garitano, en el presente. Concluye su relación con la entidad indálica, si no hay unión futura, en la 2025/26.

Los flancos

En los costado también hay material para lo que habrá que estudiar con quiénes interesa mantener la relación. Largie Ramazani seguramente salga. Concluye su vinculación a final de la 2024/25 y es obligada la venta para 'sacarle' beneficios a un jugador que llegó sin coste y que ha tenido novias, muchas, en el mercado veraniego pasado y en el invernal –se dice que el Villarreal estaba dispuesto a llevárselo por 8 millones de euros y que la UDA rechazó la oferta–.

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Embarba y Leo Baptistao, que puede jugar por banda y que ha sido utilizado para hacerlo como punta si no hay delanteros –este año se ha curtido por ese mal endémico–, concluyen su relación con la UDA al final de la 2025/26, y Sergio Arribas, contratado hasta la finalización de la temporada 2028/29, también podrían tener continuidad la próxima campaña, si bien es cierto que el jugador hecho en Valdebebas tiene cartel para salir el próximo verano por su aportación. Tiene gol, como lo demuestra el hecho de ser el 'pichichi' rojiblanco en Primera División, con seis goles.

Cubierto

En cuanto a los delanteros, la parcela más vilipendiada este curso por haberse centrado todos los males en esa zona, tiene a Luis Suárez y a Ibrahima Koné, que llegarán 'frescos' al inicio de temporada. El cafetero llegó comprado este pasado verano desde Marsella, a donde se fue por el descenso del Granada, y tiene para unos tres meses de recuperación tras ser operado días pasados. El maliense pasó por la misma situación tras su lesión con la selección de su país en un amistoso y trabaja para llegar en breve para ayudar, si bien parece que no lo hará a tiempo para que su aportación contribuya a la salvación del equipo.

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En todas las líneas, la UDAlmería tiene opción de compra con algunos de los llegados, pero no con otros. Cedidos están Choco Lozano, que llegó desde el Getafe, y Bruno Langa, que lo hizo desde el Chaves portugués.

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