La UD Almería, de la nada al todo

El mismo refranero indica que por febrero sale el oso de su osera, el oso o el león de la leonera, que fue como Paco Jémez consideró al equipo rojiblanco justo dos días antes de visitar el Estadio de los Juegos Mediterráneos para enfrentarse a los indálicos, que acumulaban cinco jornadas sin 'oler' la victoria, cuando unos meses antes había cosechado, por ejemplo, siete triunfos seguidos –entre la jornada undécima y la decimoséptima– o un triunfo más, con dos empates entre el séptimo y el octavo partido ganado. También dicen del segundo mes del año 'febrero febrerín, el más corto y el más ruin'. Sin embargo, para la UDA, en bueno enero se quedó en desastroso y el ruin febrero reportó todo lo que no dio el primero.

El primero sí que fue ruin. La UD Almería, en la semana de preparación del primer partido del año, disputado el día 2 de enero frente al FC Cartagena, inauguró el peor mes de la temporada 2021/22. A la cita con los albinegros, Rubi llegó con un 'manojo' de ausencias, una preparación deficiente como consecuencia de las secuelas, que impidieron realizar un mejor trabajo, lo que luego condujo a las lesiones de algunos jugadores, la más grave la de José Carlos Lazo, que se lesionó en un disparo a portería, en ese partido, cuando solo se habían disputado 13 minutos del primer partido de 2022. Además, Juan Villar y Dyego Sousa se lesionaron en el partido de Copa del Rey, el onubense sin llegar a jugar y el portugués a los pocos minutos de entrar al terreno de juego el partido disputado frente al Elche.

En ese plazo, entre el 2 y el 29, fechas del partido ante el Cartagena y del disputado en el Carlos Tartiere frente al Real Oviedo, solo un punto, que pudo no ser ninguno o los tres, en el Estadio de Gran Canaria, recuperando sensaciones, pero con un equipo 'viciado' por las ausencias que, como ahora en febrero, se cebaron sobre una parte específica y esencial del esquema, con la rémora de tener que adaptar jugadores a posiciones que no eran las suyas y que, como es lógico, perjudicaron al buen rendimiento del equipo. Sin delanteros, el Almería firmó en los cinco partidos de enero lo que rara vez había pasado en los veinte primeros partidos de Liga. Entre la primera y la vigésima, solo en tres ocasiones –Ponferrada, Eibar y ante el Huesca– se quedó sin ver portería. En los cinco primeros partidos de 2022 pasó también en tres ocasiones –ante Cartagena, Eibar y Real Oviedo–.

En ese tramo, no fue capaz de dejar su puerta a cero en ninguno de los cinco encuentros disputados, algo que sucedió hasta en ocho encuentros de los 20 disputados antes de las vacaciones navideñas y el 'pastel envenenado' que llegó con los positivos en covid-19.

Lo de febrero tiene doble lectura. La buena viene deparada por los resultados y ese posicionamiento en puestos de ascenso directo, que es el objetivo hasta final de temporada. Lo malo son las lesiones, que siguen centrándose en un sector también determinante, como es el eje de la zaga, aunque también afecte a otras zonas. Sin embargo, la más dañada es la del centro de la zaga, con los dos centrales diestros lesionados y Chumi que no podrá jugar en la presente temporada. Mañana se sabrá la lesión de Daniel Carriço y si esta será para mucho o solo se queda en el susto que supuso la obligación de ser sustituido tras dar el pase que permitió a Sadiq Umar poner el centro del 1-0 en el partido del viernes frente al Fuenlabrada.

El caso es que los resultados sí que dan solidez al trabajo diario. Este habla de un mes 'limpio' en el que los de Rubi han sumado cuatro victorias en cuatro partidos, con dos porterías a cero y solo dos goles encajados en los dos últimos partidos, pero habiendo visto puerta hasta en ocho ocasiones.

Está claro que habrá que ir partido a partido. Marzo ofrece dos partidos en casa y dos fuera, con dificultades en ambos 'recintos' y con dificultad yendo a más con el paso de las jornadas. Así, marzo depara cuatro duelos que comenzarán el próximo viernes, día 4, en La Romareda para enfrentarse a un Real Zaragoza titubeante una temporada más, pero 'abonado' a los empates en su casa, donde ha sumado hasta ocho puntos como consecuencia de las tablas alcanzadas. Los otros seis partidos reparten penas y alegrías a partes iguales, con tres victorias y tres derrotas.

Recibiendo en el Estadio de los Juegos Mediterráneos al CD Lugo, al sábado siguiente, el calendario se empina para bien o para mal, dependiendo de los resultados que se obtengan en ese partido. El primero será para visitar el Heliodoro Rodríguez López y un Tenerife muy sólido en casa, donde ha logrado mantener su puerta a cero en ocho de los catorce partidos disputados.

El mes concluye con otro duelo de altura ante un Girona que se ha atascado en las últimas jornadas de la competición, viendo el ascenso directo bastante lejos.